Yassine N., de 21 años y vecino de Lleida, trabajaba en el restaurante y cuando cobraba con las tarjetas se iba a otra dependencia a pasarla por el datófono, tiempo que aprovechaba para apuntar número de tarjeta, fecha de caducidad y código CCV.

Luego le daba los datos a un amigo, Mounir K., de 23 años y vecino de Tèrmens, que era el que compraba por Internet.

Los Mossos iniciaron la investigación a raíz de la presentación de dos denuncias en dependencias policiales, en la que se hacía constar el recargo a sus visas de montantes económicos de una forma fraudulenta.

El único punto en común entre los gastos de las tarjetas de las dos denuncias era el restaurante.

Las compras de los detenidos son de lo más variadas, desde estancias en hoteles, hasta electrodomésticos y productos informáticos, entre otras.