La Guardia Civil y el Servicio de Vigilancia Aduanera han culminado una operación antidroga en las provincias de Granada, Toledo y Bilbao que se ha saldado con ocho detenidos, dos colombianos y seis españoles, y el desmantelamiento de una red que introducía cocaína en España camuflada en cuentas para realizar collares artesanos.

En el marco de esta operación policial, denominada 'Coral' y llevada a cabo en colaboración con el departamento de Seguridad de Correos, se han decomisado más de 20 kilogramos de cocaína, 18 kilos de ácido bórico para 'cortarla' y cinco vehículos de alta gama. Además, entre los detenidos se encuentra el cabecilla de la banda en España, según ha confirmado en una nota el Instituto Armado después de que ayer se levantara el secreto de sumario.

La operación 'Coral' se inició en noviembre del año pasado, a raíz de que la Guardia Civil tuviera noticias de que una organización internacional estaba introduciendo cocaína en España a través de paquetes postales procedentes de Colombia, Perú y Argentina que decían transportar muestras de artesanía, concretamente cuentas artesanales para la elaboración de collares.

Después de varios meses de investigación, el pasado 9 de febrero se interceptó en Calahonda (Granada) una caja que contenía varios paquetes con cuentas de collar entre las que se camuflaban otras que contenían cocaína de gran pureza.

Los paquetes contenían una proporción variable de cuentas de collar con cocaína, entre un 10 y un 20 por ciento, de modo que las que contenían cocaína podían distinguirse porque no iban agujereadas.

Cuando los destinatarios recogían sus paquetes en la oficina de Correos, inmediatamente los trasladaban y se los entregaban al cabecilla de esta red, quien ya se encargaba de extraer la cocaína de las cuentas de collar y 'cortarla', para su posterior distribución en las provincias de Madrid, Toledo, Bilbao y Granada.

En la primera fase de explotación de la operación, el pasado 9 de febrero, fueron detenidos tres vecinos de Calahonda (Granada) y se decomisaron 1,7 kilogramos de cocaína de gran pureza.

Toledo y motril

Tras estas detenciones, las investigaciones posteriores llevaron a los agentes hasta la provincia de Toledo, y más concretamente a la localidad de Illescas, en donde el pasado 27 de marzo fueron detenidas cuatro personas más.

Uno de los detenidos era un vecino de Bilbao al que la fase de explotación de esta operación sorprendió en la localidad toledana.

Entre los detenidos en Illescas se encontraba el cabecilla de la red, quien fue sorprendido en el proceso de extracción de la coca de las cuentas de collar, ya que ocultaba un laboratorio de transformación en su casa.

En el registro domiciliario los agentes encontraron un bidón que contenía más de 20 litros de un compuesto de ácido sulfúrico, acetona y las cuentas de collar con la cocaína; además de 18 kilogramos de ácido bórico para posteriormente 'cortar' la droga.

Con estas cantidades, los agentes estiman que el detenido hubiera conseguido finalmente más de 20 kilogramos de cocaína para su distribución.

La última fase de explotación de la operación se llevó a cabo la semana pasada, cuando fue detenido el último integrante de esta red, un vecino de Torrenueva-Motril (Granada), según indicó el Instituto Armado, el cual ha precisado que siete de los arrestados ya han ingresado en prisión.