Así, ambos departamentos pondrán en común sus líneas de ayuda para el fomento de energías renovables, concretamente en el campo de la energía solar. A través del convenio entre Medio Rural y Economía se determinará que actuaciones serán subvencionables por el Inega y cuales por Agader.
El objetivo que promueven ambos organismos es "evitar el solapamiento y la duplicidad" de ayudas, para lograr así "su complementariedad" y "diversificar e incrementar" el número de ayuntamientos beneficiarios de las subvenciones.
La potencia de los proyectos de energía solar fotovoltáica subvencionables por Agader no superará los 40 kilovatios (kW), mientras que los de energía solar térmica no deberán exceder de una superficie de 150 metros cuadrados si el destino es el calentamiento de piscinas, 50 metros cuadrados para polideportivos y 35 metros cuadrados para el resto de edificaciones. El Inega, por su parte, asumirá los restantes proyectos.
Además, el Inega se compromete a supervisar, desde el punto de vista energético, la viabilidad de los proyectos tramitados en Agader. Los técnicos del Instituto emitirán una ficha previa de viabilidad para que Agader pueda resolver la selección de proyectos con garantías.
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