Las denuncias registradas en Palma por malos tratos, tanto a nivel familiar como por violencia de género, disminuyeron en 2009 un 8,3 por ciento respecto al año anterior, al interponerse unas 1.300 -100 menos que en 2008-, según explicó hoy la inspectora del Cuerpo Nacional de Policía en Baleares, Janka Jurkiewicz.

Durante la presentación de un acuerdo de colaboración entre la Policía Nacional y la Local en materia de violencia de género, la portavoz del cuerpo de seguridad explicó que la mayor parte de denuncias deducidas por parte de víctimas de violencia doméstica, en torno al 50 por ciento, afectan a mujeres entre 25 y 45 años, mientras que un 25 por ciento tienen entre 18 y 24, y entre el 20 y el 25 por ciento poseen de 25 a 45 años.

En referencia al acuerdo adoptado entre ambos cuerpos, el inspector Javier Ribas explicó que consistirá en la elaboración de un protocolo de valoración sobre el nivel de riesgo que presenten las víctimas de maltratos, de modo que se unifiquen los parámetros empleados por las Policías Local y Nacional al atender a estas personas y se acuerde la protección y el tratamiento más adecuado de acuerdo al riesgo que presenten.

De este modo, cuando la Policía tenga conocimiento de un episodio de violencia de género deberá determinar las circunstancias que rodean a la víctima y a su presunto agresor y las relaciones mantenidas con éste, a fin de poder concretar el nivel de riesgo de violencia y las medidas que deban adoptarse en cada caso para asegurar la protección.

Asimismo, cada uno de los niveles de riesgo, que se harán constar en un formulario, llevará aparejadas las oportunas medidas policiales de protección, que serán dadas a conocer a la víctima.

En este sentido, Ribas manifestó que esta medida, "excepcional" en algunos puntos de la Península así como en las islas, permitirá mejorar la calidad de los servicios ofrecidos a las víctimas y determinar protocolos y actuaciones, incidiendo principalmente en la prevención, tal y como recalcó.