EB pide al Gobierno vasco que impulse el proceso para aprobar un nuevo plan de convivencia

El portavoz parlamentario de Ezker Batua Berdeak, Mikel Arana, pidió hoy al Gobierno vasco que, en vez de retrasar la aprobación del Plan de Convivencia Democrática y Deslegitimación de la Violencia, "impulse el proceso para aprobar un nuevo plan".

En rueda de prensa en el Parlamento vasco, Arana advirtió de que el documento, sujeto a aportaciones de los grupos, no es una reformulación del Plan de Educación para la Paz elaborado por el anterior Ejecutivo, sino que es "un plan nuevo", elaborado con una visión "excesivamente reduccionista" de la cuestión, que se corresponde con la que tienen el PSE y el PP.

Según Arana, el documento propuesto "no puede convertirse en una cruzada ideológica", sino que "es preciso reconocer la existencia de un conflicto", lo que, a su juicio, requiere de propuestas "más integradoras que las que hace el actual Plan".

"Esto no es una cuestión de quince días más o menos, aquí lo que hace falta es voluntad, lanzar un verdadero proceso de participación para la elaboración de un nuevo plan y no retrasarlo quince días con la esperanza de que algún partido político le dé el visto bueno", señaló.

En ese sentido, reclamó un tratamiento "más integral" de la defensa de la paz y de los derechos humanos y opinó que el planteamiento que recogía a este respecto el documento elaborado por el anterior Ejecutivo era "mucho más adecuado".

En cuanto a la medida referida a posibilitar que los testimonios de las víctimas lleguen a las aulas, Arana consideró "negativo" tanto "impedir" como "obligar" a que haya esa presencia.

A su entender, "en muchos casos", esta medida "puede que no tenga resultados pedagógicos" y anunció que su grupo no es partidario de "estimular" la presencia física de las víctimas en los colegios, como propone el documento del Ejecutivo.

Apoyo al profesorado

Asimismo, indicó que tampoco le parece adecuado "poner en entredicho el compromiso del profesorado vasco en la defensa de los derechos humanos y la transmisión de valores".

Por todo ello, reclamó que la propuesta sea debatida de manera "completa e integral" en el Parlamento vasco, "no sólo con las aportaciones de los partidos, sino teniendo muy en cuenta las propuestas de la comunidad educativa".

En este sentido, criticó que al Ejecutivo "no parece interesarle la visión que puedan tener los distintos agentes de la comunidad educativa" de este tema y recordó que ellos son "los que al final lo tienen que aplicar".ALEGACIONES

El representante de EB en la Cámara vasca presentó las alegaciones que su formación política ha realizado al Plan de Educación para la Paz, sin que por ello "pueda deducirse cuál será la postura definitiva al final del proceso".

Aunque no solicitó la retirada del documento, precisó que ello "no obsta para entender que el mismo adolece de notables carencias y de una visión excesivamente parcial y reduccionista del fenómeno de la educación en valores".

Arana justificó la aportación de estas alegaciones porque, en una materia "tan sensible e importante como la educación en valores, se debe actuar con responsabilidad y actitud constructiva".

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