Además de entorpecer el viaje a algunos de los convocados, va a impedir la presencia en la conferencia de las delegaciones de Irlanda, Surinam, Suecia e Inglaterra. Con problemas se encuentran también los representantes que llegarán desde Bélgica, Lituania y Letonia, si bien anunciaron que si no pueden hacerlo en avión intentará llegar en furgonetas.

Así lo avanzó en rueda de prensa el alcalde de Lugo, el socialista Xosé López Orozco, quien lamentó estas ausencias, aunque advirtió que apenas se resiente el programa en el apartado de ponentes.

En total se espera la presencia de más de doscientos participantes en esta cumbre, que representarán a 40 ciudades de 34 países, donde analizarán cuestiones relaciones al mundo del alcohol y otras drogadicciones.

Se trata de una conferencia organizada por el Ayuntamiento de Lugo, con la colaboración, entre otros de la Organización de los Estados Americanos (OEA), la Comisión Interamericana para el Control del Abuso de Drogas (CICAD), la FEMP, la Diputación de Lugo y los ministerios de Sanidad y Exteriores.

En la rueda de prensa, el secretario ejecutivo de la OEA, James Mack, resaltó que esta cumbre será de "gran importancia". Lo que se pretende es ahondar en puntos comunes, "para mejorar la capacidad de los servicios locales hacia las personas que padecen de adiciones".

Mack advirtió que hay un grupo "significativo" que, en ocasiones, exagera en el consumo de alcohol y drogas ilícitas, lo que hace que "sufran en su vida y en sus relaciones familiares, sociales y de salud".

A través de la cumbre se pretende concienciar al mundo de que este problema es una "enfermedad" que se debe ser tratada como tal y no como una debilidad moral.