Así, los problemas más habituales detectados, sobre todo en las personas que tienen algún defecto en la vista como estrabismo o ambliopía, son mareos, visión doble, náuseas y desequilibrios.

Por este motivo, y debido al éxito de los últimos estrenos de cine en 3D ante, cualquiera de estos síntomas es recomendable acudir al óptico-optometrista, ya que es posible que pueda existir un problema de visión grave que no ha sido detectado con anterioridad.

La tecnología tridimensional es un mecanismo que copia la técnica que utiliza el cerebro para distinguir con la vista el relieve y la profundidad, por ello, la disociación de imágenes en una película puede suponer un esfuerzo adicional para el cerebro, que da instrucciones a la musculatura ocular para que la alineación de ambos ojos sea la correcta.

En algunos casos, la musculatura ocular no puede compensar este defecto y se produce una relajación total que se conoce como estrabismo. Tampoco puede haber visión estereoscópica si uno de los dos ojos no manda la información adecuada al cerebro y esto es precisamente lo que les ocurre a las personas que tienen ambliopía, conocida popularmente como "ojo vago". Por ello, las personas que usen alguna corrección óptica deben utilizarla debajo de las gafas 3D.

Asimismo, el Colegio informó que, a pesar de llevar correcciones, también se puede tener un pequeño malestar durante los primeros minutos de la película al sufrir una pérdida momentánea de coordinación entre los ojos tales como mareos, visión doble, porque es el tiempo que los ojos necesitan para adaptarse. Si aun así el problema persiste, es recomendable acudir al óptico-optometrista para una revisión binocular.