El portavoz del PSE-EE, José Antonio Pastor, defendió hoy la iniciativa registrada por su grupo en el Parlamento vasco contra "la campaña de acoso de la ultraderecha" contra el juez Baltasar Garzón por su investigación sobre los crímenes de la dictadura, y denunció que hay quien pretende que Franco "vuelva a ganar la guerra". Además, afirmó que esta causa y la que se sigue también contra Garzón por supuestos cobros por unos cursos "son parte de una especie campaña política, mediática e ideológica".

El grupo del PSE en el Parlamento vasco registró hoy una proposición no de ley en la que muestra su "solidaridad y apoyo" al juez Baltasar Garzón "ante la campaña de acoso a la que está siendo sometido por grupos de ultraderecha por su investigación judicial de los crímenes del franquismo".

La iniciativa, que los socialistas vascos harán extensiva a las juntas generales y a los ayuntamientos de Euskadi, ha sido registrada después de que el pasado día 7, el magistrado del Tribunal Supremo Luciano Varela resolvió proceder penalmente contra el juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón por un presunto delito de prevaricación, que habría cometido al investigar las desapariciones durante el franquismo. La decisión de Varela se produjo a instancias de las actuaciones emprendidas por Falange y Manos Limpias.

Además, la presentación de la iniciativa del PSE se produce el mismo día en que Garzón debe volver al Tribunal Supremo para declarar como imputado por cohecho y prevaricación en la causa que instruye el juez Manuel Marchena. Garzón deberá aclarar si pidió dinero al Banco Santander cuando se trasladó a la Universidad de Nueva York con una licencia de estudios entre marzo del 2005 y junio del 2006 para patrocinar los cursos que allí impartió.

Tras registrar el texto, el portavoz del PSE, José Antonio Pastor, compareció ante los medios de comunicación en los pasillos de la Cámara autonómica para explicar la postura de su grupo en relación a este asunto. Según indicó, la iniciativa se ha presentado con el objetivo de "apoyar la independencia del Poder Judicial y al mismo tiempo prestigiar la acción de la Justicia".

Tras mostrar su "respeto absoluto al Poder Judicial y sus decisiones", destacó la necesidad de "reafirmar su independencia como pilar fundamental del sistema democrático", para lo que consideró que hay que "salvaguardarlo de las maniobras de quienes quieren utilizar la Justicia al servicio de intereses desestabilizadores".

En su opinión, con la querella presentada por Manos Limpias y Falange contra Garzón se ha producido "una utilización perversa" de la figura de la acusación popular, por lo que apostó por revisar este mecanismo.

Pastor consideró que la propuesta de su grupo es una iniciativa en la que "pueden coincidir todos los demócratas vascos". "No tiene carácter partidista y tiene que ver con algo en lo que todos podemos coincidir: la legitimidad y la dignidad del sistema democráticos".

"emblema internacional"

Por ese motivo, confió en que "ningún demócrata vasco, sea de izquierdas o de derechas, nacionalista o no nacionalista, puede estar de acuerdo ni sentirse cómodo con el hecho de que Falange Española pueda sentar en el banquillo de los acusados a un juez que es un emblema, a escala nacional e internacional, de una Justicia independiente y democrática".

El dirigente del PSE advirtió de que su partido "no está dispuesto a que el franquismo le quiera meter un gol a la democracia española , colándose en los tribunales y aprovechándose de las oportunidades que ofrece la democracia para tratar de pervertirla". "Parece que algunos quieren que Franco vuelva a ganar la guerra y volver a enterrar a las víctimas del franquismo sin dejarles siquiera el derecho a la memoria y la reparación".

Pastor afirmó que es "grave" que "organizaciones como Falange y Manos Limpias puedan permitirse el lujo de querer arruinar la carrera de un juez que se ha caracterizado por su lucha sin cuartel contra el terrorismo". "Es un absoluto disparate que a 30 años de la democracia española, grupos parafascistas quieran utilizar los resquicios y las garantías del sistema democrático para tratar de pervertirlo", censuró.SANTANDER

El dirigente socialista también se refirió a la causa por la supuesta relación entre los cobros que pudo percibir Garzón por la organización de unos cursos patrocinados por el Banco Santander y su posterior decisión de no admitir a trámite una querella contra directivos de esa entidad bancaria.

"Creo que todo es parte de una especie de campaña política, mediática e ideológica", señaló Pastor, quien añadió que "en este caso concreto, además, parece que ha habido aclaraciones suficientes y necesarias por parte de quien le contrató y el sitio donde dio las conferencias".