El secretario confederal de Acción Sindical de CCOO, Ramón Górriz, afirmó hoy que el documento que ha presentado el Gobierno para pactar la reforma laboral tiene "un perfil alejado todavía del acuerdo" y abogó por un pacto en el que "se apueste por la contratación indefinida y se elimine la temporalidad injustificada, manteniendo todos los derechos y el no abaratamiento del despido".

Ramón Górriz sostuvo, en una rueda de prensa que ofreció en Alsasua tras analizar con miembros del sindicato la situación del diálogo social, que existen en el documento del Gobierno "zonas de ambigüedad y zonas inconcretas que se tienen que seguir trabajando".

Así, consideró que en primer lugar se deben abordar en la negociación los acuerdos que requieren de una "urgencia social", y defendió, por ejemplo, alcanzar un acuerdo en el que "se refuerce todo lo que tiene que ver con el empleo en los jóvenes, apostando por las bonificaciones, los contratos formativos y de prácticas, con protección social y prestaciones por desempleo".

Igualmente, señaló que "las bonificaciones deben ir totalmente dirigidas a la contratación de jóvenes y de parados de larga duración, manteniéndolas también en colectivos de dificultades, como mujeres con violencia de género o personas discapacitadas".

Asimismo, consideró necesario alcanzar un acuerdo para introducir el expediente de reducción de jornada con la finalidad de "cambiar la cultura del despido que existe en España, apostando por el mantenimiento del empleo y la formación".

"El expediente de reducción de jornada cabe que se recoja en la legislación laboral de este país y es importante que su aplicación evite que crezcan las cifras de desempleo", dijo, para defender también la necesidad de que "aumente la participación de los sindicatos más representativos en el gobierno de la flexibilidad interna de las empresas".

Por otra parte, Górriz se mostró en contra de la creación de agencias privadas de recolocación con ánimo de lucro y consideró que "en la situación que vive España lo más importante es reforzar los servicios públicos de empleo, tanto los de las Comunidades Autónomas como el central, y que estos generen la intermediación necesaria".

En esta línea, advirtió de que estos servicios públicos deben tener mayores recursos humanos y económicos y argumentó que España está "muy alejada de las cifras de atención que se dan en los países centrales de la Unión Europea".