A causa de ello, mediante un decreto emitido con fecha 13 de abril, el primer edil de Aldeamayor cesó de todas las delegaciones a los concejales del PP, Incluida la tenencia de alcaldía que ostentaba Juan José Villalba Pinilla.

Por tanto, y desde este momento se plantea un gobierno minoritario constituido tan sólo por tres concejales del Grupo Unidad Regionalista.

José Luis Sanz Ferrero fue elegido alcalde el pasado 29 de enero, con los tres votos de su propio Grupo, Unidad Regionalista, y los cuatro votos de los concejales del Partido Popular, momento en el que el Partido Socialista, el más votado en las Elecciones Municipales de 2007, ya anunció la inestabilidad del acuerdo alcanzado entre ambas formaciones, "sólo con el objeto de mantener el poder".

"Poco ha durado el pacto, que nació forzado desde los dirigentes provinciales del PP, Ramiro Ruiz Medrano y Jesús García Galván, que amenazaron a sus concejales con la expulsión del partido si no apoyaban a José Luis Sanz para la Alcaldía", criticaron fuentes socialistas.

Éstos insisten en que ya se vislumbraba este final puesto que las disensiones entre ambos grupos políticos se hicieron patentes entre los meses de septiembre y diciembre del pasado año, cuando el PP incumplió el pacto de dejar la Alcaldía a los regionalistas, tal y como acordaron en la Moción de Censura presentada conjuntamente en septiembre de 2007 contra el alcalde socialista, Bernardo Sanz Manso, que había sido la candidatura ganadora de las Elecciones de Mayo de 2007.

No muchos días después de ser elegido alcalde, José Luis Sanz Ferrero vio cómo su portavoz, Jesús González Pérez, le presentaba la 'dimisión' como concejal, con lo que su grupo quedaba completamente descabezado.

"Jesús González procedía también del PP, grupo al que había pertenecido en la anterior legislatura, y nunca ocultó sus discrepancias con Luis Mª Gómez Sanz, que es el presidente local del PP y anterior alcalde en varias legislaturas", añadieron desde el PSOE, que aseguró que nadie en la localidad se atreve a vaticinar cómo va a terminar esto, "ya que las disensiones entre 'populares' y 'regionalistas' son patentes en el día a día, haciendo imposible un gobierno de consenso entre ambas formaciones".