Los agentes de las policías locales de 12 municipios de la provincia de Pontevedra podrán acceder en las próximas semanas a la base de datos de violencia de género (Viogen), iniciando así una iniciativa que el subdelegado del Gobierno, Delfín Fernández, calificó de "pionera".

Se trata de los ayuntamientos de Pontevedra, Vigo, Redondela, Marín y Vilagarcía en el ámbito de la Policía Nacional, así como Baiona, A Estrada, Lalín, Caldas, Bueu, O Grove y Sanxenxo en la demarcación de la Guardia Civil.

El subdelegado del Gobierno en Pontevedra avanzó que las juntas de seguridad de estos ayuntamientos aprobarán esta solicitud a partir de la próxima semana, que él trasladará luego a la Secretaría de Estado.

"A los pocos días las policías locales podrán acceder a esta base de datos, mediante claves que manejarán los agentes autorizados", explicó Delfín Fernández, convencido de que esto supondrá un "gran avance" en la lucha contra la violencia de género.

Territorio "muy seguro"

El anuncio surgió en una comparecencia del subdelegado del Gobierno para rendir balance de la evolución de la criminalidad en la provincia de Pontevedra que, dijo, es un "territorio muy seguro".

Aunque reconoció que la tasa de criminalidad en la provincia creció unas décimas durante 2009, sin embargo destacó que "es la cuarta menor desde el año 2000 y está muy por debajo de la media española", pese a que la población creció en los últimos cinco años un 3,5 por ciento y se incorporaron nuevos supuestos delictivos como la violencia de género y contra la seguridad vial.

Delfín Fernández destacó también que "mejoró muy significativamente" la eficacia policial, que se situó durante el año pasado 14 puntos por encima de la media estatal, lo que redundó en una "mayor percepción" de la seguridad ciudadana por parte de los pontevedreses en concreto y de los españoles en general.

Menos robos

"España es uno de los países europeos más seguros", aseguró Delfín Fernández, quien negó "rotundamente" que la situación de crisis económica que atraviesa el país tenga repercusión alguna en las tasas de criminalidad.

Partiendo de la base de que "si la crisis influyera en conductas delictivas sería en delitos y faltas contra el patrimonio, debido a la necesidad de consumo de las personas", el subdelegado insistió en que desde 2004 se registra un descenso sostenido en los delitos de patrimonio. "Concretamente 2009 fue el tercer año con menos robos con fuerza del último decenio", concluyó.