En un comunicado, la Benemérita informó de que estos dos hombres fueron denunciados por infringir el Decreto 69/99, de 4 de junio, por el que se regula la pesca deportiva y recreativa en las aguas interiores del archipiélago balear.

Así, los agentes de la Guardia Civil les incautaron dos cap roig; cuatro sepias; una barracuda; un esparraig; un salmonete y una centolla de seis centímetros, así como 250 metros de redes de pesca y una polea para la recogida de éstas.

Esta operación se produjo, a raíz de la instalación de puntos de observación por parte de la Patrulla Fiscal Territorial de la Benemérita de Pollença para intensificar la vigilancia ante la proliferación de la pesca furtiva en la zona norte de Mallorca.

La citada denuncia se interpuso, después de que en la mañana del pasado 1 de abril en la Cala Sant Vicenç y, al aproximarse a la playa, el patrón de una embarcación se percató de la presencia de la Guardia Civil por lo que intentó realizar una maniobra evasiva, desistiendo en su actitud cuando visualizó las señales de alto.

Una vez en la playa, la embarcación, de dos motores fuera borda y de la lista 7ª 'pesca deportiva'), se identificaron a los ocupantes y, posteriormente, la Guardia Civil halló en el interior de la citada embarcación fueron utensilios de pesca para la recogida de redes, que se encontraban escondidos en un compartimiento de la embarcación, así como un cubo grande para alojar las redes, un cajón con diferentes tipos de pescado y mariscos.

Finalmente, se procedió a retirar en compañía de los infractores unos 250 metros de redes, con las que al parecer habían capturado las piezas de pesca.