Precisamente, la presidenta de Emaya, Cristina Cerdó, visitó hoy el taller de Cáritas donde se lleva a cabo la recuperación de parte de los 17.721 juguetes recogidos entre el 14 de diciembre de 2009 y el 16 de enero de 2010.

Así, aquellos juguetes que se recuperan son vendidos a un precio simbólico en las tiendas de Cáritas, con el objetivo de "favorecer la autoestima de las personas, que ven de esta forma recompensado su esfuerzo y trabajo, reinvirtiendo las ganancias obtenidas en sus propios programas de inserción". Por su parte, aquellos que no son reparados son donados a entidades que hacen trabajo social con niños enfermos o familias con dificultades económicas.

Así, Cerdó consideró "muy positivo" el balance de la segunda edición de la citada campaña, puesto que se consiguió aumentar el número de juguetes usados recogidas por la empresa municipal de Emaya en casi 400 más que en la primera edición de la iniciativa, cuando se recogieron 17.344.

"La cultura de la reutilización, con los enormes beneficios medioambientales que supone, se encuentra cada vez más presente entre la ciudadanía", subrayó la presidenta de Emaya, quien estimó que "poco a poco, conseguimos ser más conscientes de la importancia de reducir la generación de residuos y de apostar por el reciclaje".

Durante su visita, Cerdó saludó a parte de la veintena de trabajadores que realizan su labor en el taller de juguetes en el marco de los programas de inserción laboral y social de Cáritas Mallorca, orientados a "servir de ayuda a familias con dificultades económicas y personas en riesgo de exclusión".

Cáritas Mallorca ha sido una de las 46 entidades que han recibido juguetes recogidos por Emaya dentro de la citada iniciativa medioambiental y solidaria, dirigida a "fomentar conductas responsables y sostenibles como la reutilización".