Así, la Federación de Enseñanza de CCOO se felicitó por la "urgencia y seriedad" con la que el Síndic de Greuges ha afrontado estas quejas, al tiempo que confió en que su actuación "vele por la defensa de los derechos y posibilite el cumplimiento de unos acuerdos que pretenden mejorar el funcionamiento de las escuelas infantiles dependientes de la Generalitat Valenciana".

En una de las quejas se pone en conocimiento del síndic el "incumplimiento" por parte de la Conselleria del Acuerdo de Plantillas, lo que conlleva una "falta de dotaciones y las dificultades en el funcionamiento diario de los centros, donde no existen suficientes recursos humanos que hagan frente a la masificación de las aulas". De este modo, CCOO-PV lamentó que "no se proporciona un mínimo de calidad para la educación".

Este acuerdo, alcanzado entre los sindicatos y la administración educativa tiene como objetivo "reforzar la plantilla con un educador más por cada tres unidades, lo que significaría una adecuación a las necesidades de los centros". CCOO también denuncia que la oferta actual de plazas en este tramo de edad es "insuficiente".

La falta de regulación de las Necesidades Educativas Especiales (NEE) en el tramo de edad entre los cero y los tres años, en el que se atiende al alumnado que requiere atención específica y personal especializado, "no hace más que reforzar el abandono y la despreocupación del Gobierno valenciano por estos centros", lamentó el sindicato.

La segunda queja pone en conocimiento del síndic "la falta de acción" por parte de las Consellerias de Educación y Justicia y Administraciones Públicas "al no regular la situación de desigualdad profesional de los maestros que prestan sus servicios en dichas escuelas y ante el incumplimiento del acuerdo sobre retribuciones de los equipos directivos aprobado por el Consell". CCOO ya denunció con anterioridad a las autoridades competentes la situación de "abandono de estos centros, sin obtener ninguna respuesta".