Uno de los heridos en el incendio de un cuadro eléctrico ocurrido esta tarde en el edificio apartahotel Riscal de Alicante, un varón de 40 años, se encuentra muy grave y se considera un "gran quemado", mientras que otro hombre, de 46 años, presenta quemaduras en el 60 por ciento del cuerpo, según informó hoy el Centro de Información y Coordinación de Urgencias (CICU).

En el incendio, además de estos dos hombres, resultaron heridos otro varón de 46 años, que tiene quemaduras en las dos manos, y una mujer de 91 años, herida leve por inhalación de humo. Las cuatro personas fueron atendidas por los servicios médicos y trasladadas hasta el Hospital General de Alicante.

Los hechos sucedieron cerca de las 15.20 horas en el sótano del apartahotel Riscal, situado en la calle Poeta Vila y Blanco de Alicante, donde tres operarios de una empresa eléctrica se encontraban manipulando el cuadro eléctrico del edificio, momento en el que se produjo una explosión que les provocó heridas graves.

Por su parte, el alcalde en funciones de Alicante, Miguel Valor, junto al director general de Seguridad de Emergencias del Ayuntamiento, Carlos Cormenzana, coordinó las tareas de rescate y extinción del fuego, tal y como señaló el Consistorio en un comunicado.

"En estos momentos sólo nos preocupa el estado de las personas heridas, porque, gracias a la rápida y eficaz respuesta de los bomberos y Policía Local la situación está totalmente controlada", indicó Valor.

Unidades especiales en extinción y rastreo del Servicio de Prevención, Extinción de Incendios y Salvamento (SPEIS) y una veintena de agentes de la Policía Local acudieron al lugar del siniestro, rescataron a los heridos, sofocaron el fuego con espuma hidratante y acordonaron la manzana.

Por su parte, la concejala de Asuntos Sociales y teniente de alcalde, Asunción Sánchez Zaplana, activó el protocolo de emergencias de su departamento por si alguno de los inquilinos del inmueble precisaba realojarse, mientras que la Concejalía de Atención Urbana puso a disposición del edificio un generador de alta capacidad para recuperar la energía eléctrica mientras técnicos de Iberdrola reparan la avería.

El hecho de que la explosión se registrara en el sótano del edificio, de 31 plantas, y la rápida intervención de los cuerpos de seguridad y emergencias municipales han evitado que el inmueble precisara ser desalojado.