«Estoy nerviosa pero feliz», dijo. Tras estudiar derecho en la Universidad de La Habana emprendió su odisea rumbo a Nassau (Bahamas) y desde allí se facturó en un viaje de seis horas «encogida como un ovillo» para poder acogerse a la ley de asilo.
Consigue el asilo tras facturarse por correo
Sandra Lo Santos, joven cubana que llegó a Miami hace más de un año con el curioso método de enviarse a sí misma comprimida dentro de una pequeña caja de correos, consiguió ayer el asilo político en los EE UU.
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