Barreda y Botín acuerdan implantar la tarjeta inteligente entre los profesionales del ámbito sanitario de C-LM

El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, firmó hoy en Toledo un convenio de colaboración con el presidente del Banco Santander, Emilio Botín, con el fin de iniciar la implantación de la tarjeta inteligente entre los profesionales del ámbito sanitario de la Comunidad Autónoma.

Barreda explicó que dicha tarjeta acabará siendo un instrumento "muy valioso" cuando se generalice en el conjunto de los sistemas sanitarios de las distintas comunidades autónomas para homogeneizar y combinar "más fácilmente" toda la sanidad española, porque "no tiene sentido" que haya "17 subsistemas" desconectados entre sí.

El presidente regional se mostró seguro de que esta experiencia piloto, que comenzará en los hospitales de Toledo y Guadalajara, será un "éxito" y concretó que el objetivo es que el sistema se vaya extendiendo. En Castilla y León ya se ha implantado esta herramienta tecnológica, según recordó Barreda.

Al hilo, situó esta experiencia en el esfuerzo que se está haciendo en Castilla-La Mancha para dotarse de un sistema sanitario público que sea "muy eficiente" y esté a la vanguardia de las tecnologías de la información y de la comunicación, porque "hablamos de un sector que es el que más interesa" a la población.

Barreda recalcó que desde que el Gobierno regional recibió las transferencias, Castilla-La Mancha está haciendo un esfuerzo "sostenido" en el tiempo para dotarse de más y mejores instalaciones, poniendo como ejemplo el futuro Hospital de Toledo, "la obra civil más importante que jamás se haya hecho en Castilla-La Mancha".

Por su parte, el presidente del Banco Santander, Emilio Botín, agradeció al Gobierno regional su confianza en la entidad financiera para proporcionarle una herramienta innovadora que facilitará muchas de las cuestiones que tienen que realizar los profesionales de la sanidad castellano-manchego.

Asimismo, aprovechó para dar la enhorabuena al Ejecutivo autonómico por el "gran" proceso de modernización que está impulsando en el sector de la salud, donde, dijo, esta tarjeta inteligente va a tener un papel "relevante". También, recordó que esta herramienta tiene su origen hace 12 años como resultado de la colaboración entre el Banco Santander y la Universidad de Cantabria.

Botín resaltó que esta herramienta ha sido probada en 220 universidades de todo el mundo, al tiempo que señaló que cuatro millones de estudiantes y profesores tienen hoy una tarjeta inteligente beneficiándose de sus "múltiples" servicios. Concretamente, 30.000 estudiantes y profesores de la Universidad de Castilla-La Mancha poseen dicha tarjeta.

Por último, destacó que Castilla-La Mancha es la segunda comunidad autónoma de España que más ha aumentado su inversión en I+D en los últimos cinco años y subrayó que la mayor parte de este crecimiento procede del sector empresarial. Además, dijo que el apoyo de la Junta a las pymes permitirá a la economía regional hacer frente a los desafíos que "se nos presentan".

Tarjeta sanitaria

Castilla-La Mancha es la tercera región en la que se va a implantar una Tarjeta Sanitaria Inteligente (TIP) que servirá para la identificación corporativa de los profesionales sanitarios de la región.

La nueva tarjeta inteligente, cuya tecnología ha desarrollado el Banco Santander y que no lleva como condición necesaria tener que ir ligada a una cuenta de la entidad, permitirá acreditar electrónicamente la identidad de los trabajadores del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha, lo que les autorizará el acceso a aplicaciones informáticas corporativas o, incluso, a la historia clínica electrónica de los pacientes.

También permitirá el acceso a datos de carácter personal, como servicios de acción social, o el portal del empleado, lo que abrirá paso al acceso de la información desde ordenadores personales portátiles o desde el propio domicilio de los profesionales sanitarios. Este sistema permitirá también regular el acceso a diferentes zonas de los edificios sanitarios o realizar pagos en las máquinas expendedoras de las instalaciones.

Tras la firma de este convenio se creará un Comité de Seguimiento y Desarrollo para la aplicación del mismo, que se reunirá periódicamente para definir los proyectos específicos de colaboración y promover nuevas acciones. El convenio marco tendrá una vigencia de diez años, pudiéndose prorrogarse por periodos de dos años.

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