El asentamiento gitano de Navia, desalojado por una orden judicial

Cinco familias abandonaron ayer pacificamente el terreno que ocuparon hace años junto a la nueva macrourbanización.
Miembros de las familias desalojadas ayer en Navia retiran sus enseres de la calle.
Miembros de las familias desalojadas ayer en Navia retiran sus enseres de la calle.
A. Daval
Miembros de las familias desalojadas ayer en Navia retiran sus enseres de la calle.
Una comisión judicial, respaldada por varios agentes de la Policía Nacional, desalojó ayer sin incidentes al clan gitano asentado junto al nuevo Navia. Con esta acción, derivada de una sentencia del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia, se puso fin a 22 años de ocupación, según el Secretariado Gitano, o cinco, según fuentes de la Consellería de Vivenda de la Xunta.

Representantes del Secretariado Gitano debatirán mañana en Santiago el futuro de los 30 miembros del clan con la directora de Fomento e Calidade da Vivenda. Sin embargo, la Xunta no parece proclive al realojo, ya que, según ha adelantado a 20 minutos, no eran propietarios ni de la casa ni del terreno y, además, le consta que este clan tiene patrimonio.

En la parcela se prevé construir cerca de 50 viviendas de promoción autonómica.

Una solución «irregular»

La anterior Administración firmó un convenio con este clan para agilizar su marcha, en el que le ofreció el realojo en pisos de promoción pública o viviendas de alquiler. Pero el colectivo rechazó este pacto y exigió viviendas unifamiliares. La nueva Xunta considera aquel acuerdo «de dudosa legalidad», ya que eran okupas y no propietarios.

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