La Policía Nacional detiene en Oviedo a un grupo de atracadores formado por dos hombres y una mujer

Están acusados de perpetrar cuatro robos en la capital asturiana y ya han pasado a disposición judicial.
Objetos incautados
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EP/ Policía Nacional
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La Policía Nacional de Oviedo ha detenido a un grupo de atracadores formado por dos hombres —F.R.A., de 34 años, nacido en Madrid, y con domicilio en Oviedo, y M.A.S.D. de 36 años, nacido y domiciliado en Oviedo— y una mujer, C.G.G. de 34 años, nacida en Zaragoza y residente en Oviedo. Los tres están acusados de perpetrar cuatro robos en Oviedo, uno de ellos a una entidad bancaria y los otros tres en establecimientos comerciales.

Según informó la Policía en nota de prensa, para ello utilizaban armas de fuego y pelucas. Los tres, que sumaban 27 detenciones anteriores entre todos, han pasado hoy a disposición judicial.

El Grupo III de la Jefatura Superior de Policía de Asturias, especializado en la investigación de delitos violentos contra las personas, sigue una nueva vía de investigación centrada en determinar la procedencia de las armas de fuego que empleaban, todas reales, y su posible implicación en otros hechos delictivos.

Los hechos se produjeron cuando el día 19 se cometió un atraco a una entidad bancaria ubicada en la calle Aureliano San Román. Un individuo armado con una pistola, disfrazado con una peluca y una mascarilla sanitaria, había logrado sustraer, tras intimidar a la empleada de caja, la cantidad total de 4.830 euros.

Dos establecimientos más, uno ubicado en la Avenida Ámsterdam y otro en la calle Joaquín Blume habían sido asaltados en el mes de febrero y en marzo, prácticamente siguiendo el mismo patrón de conducta: individuo solo, disfrazado, armado con una arma de fuego, impaciente y con una clara actitud amenazante y violenta.

El último atraco tuvo lugar el día 10 en un establecimiento comercial ubicado en la Avenida del Mar. De nuevo, un individuo había entrado en el establecimiento con una peluca con trenzas, tipo rastas, y tras colocar el arma en la nuca del propietario del establecimiento lo había introducido a la fuerza en un trastero, amenazándole con dispararle si salía antes de que él se marchase. La cantidad sustraída ascendió a unos 600 euros.

El punto clave de la investigación se alcanzó cuando los investigadores lograron determinar que no se estaba ante un atracador "solitario" sino que dos personas más, participan directa e indirectamente en los atracos. Uno de ellos era un hombre que proporcionaba apoyo y cobertura desde el exterior y la segunda persona, que cerraba el grupo, era una mujer que no actuaba directamente en los atracos, pera presuntamente era conocedora de cómo y cuando se daría el nuevo "golpe", actuando con posterioridad, ocultando pruebas y beneficiándose del dinero que habían robado.

La noche del mismo día del último atraco fue detenido en la calle el primer atracador encargado de ejecutar directamente los robos, el segundo se escondió en el interior de su domicilio, siendo detenido posteriormente tras conseguir el consiguiente mandamiento judicial de entrada y registro de su domicilio. La detención de la mujer no se hizo esperar y se produjo a las pocas horas.

En los registros de sus domicilios se encontraron un revolver de la marca LLAMA, Trade Mark de 2 pulgadas y seis cartuchos en recámara; una pistola TANFOGLIO de 9 mm. de color negro con 7 cartuchos en cargador; una pistola marca ASTRA, mod. 300 en su funda de cuero negro; gran cantidad de munición de distinto calibre; tres pelucas; cinta de embalar de color negro; una bolsa de bridas; un gorro negro; dos mapas; y dos guantes.

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