Según informaron fuentes de la empresa a Europa Press, la Dirección "está convencida de que puede realizarse la reestructuración de forma progresiva, ofreciendo empleo estable a gente joven, manteniendo el contrato de relevo y sin despidos definitivos, porque se garantiza la recontratación de los 350 empleados afectados".

No obstante, apuntaron que esta fórmula implica "un importante coste económico y un gran esfuerzo organizativo". "Desde el primer momento la compañía manifestó que estaba dispuesta a negociar un modelo socialmente responsable, así como las medidas que lo hicieran posible", sostuvieron las mismas fuentes.

En este sentido, indicaron que "sólo se ha avanzando en el primer aspecto con mejoras aportadas por la compañía de una fórmula que, en si misma, era muy buena", por lo que advirtieron de que, si no se producen unos avances en el convenio "que son necesarios para poder aplicar una reestructuración socialmente responsable", ésta "no se podrá llevar a cabo en los términos ofrecidos hasta la fecha".

"Si seguimos dialogando y somos capaces de llegar a acuerdos, la empresa está dispuesta a garantizar las tres semanas seguidas de vacaciones en verano, así como que la vigencia del convenio sea de cuatro años", frente a los cinco que reclamaba inicialmente.

La dirección y el Comité de empresa de GM España se reunieron hoy en Figueruelas para continuar las negociaciones de la reestructuración y el convenio colectivo y, tras pedir los trabajadores tiempo para analizar la situación actual de la misma, continuarán con un nuevo encuentro el próximo lunes, 8 de marzo.