Esta medida traerá «gravísimas consecuencias», según anunció ayer Inocencio Piernas, presidente de Hostemur, que agrupa al 99% de los hoteles de la Región (210). Dijo, como ejemplo, que en Irlanda, cuando entró la ley en vigor, bajaron los ingresos un 60%.

Ley antitabaco

Locales de menos de 100 m2: El empresario decide si se fuma o no. Eso sí, deberá avisar con un cartel.

Locales de más de 100 m2: Sólo se podrá destinar una superficie del 30% a fumadores y deberá estar señalizada y separada del resto.

Hoteles: En el 70% de las habitaciones no se podrá fumar; tampoco estará permitido en lugares de paso. Calculan que adecuar una habitación con la tecnología necesaria para cumplir con la ley (extractor de humo, purificador de aire...) costaría  2.500 euros.

Discotecas: En un principio, sólo se iba a destinar un 10% del espacio total para fumadores. Se negocia que sea el 30%. Aun así, será un lugar separado del resto.

Sanidad: Invertirá 329.000 euros en 2006 en acciones para prevenir el tabaquismo en la Región, 311.000 euros más que este año.

Adecuación: Los empresarios piden ocho meses para adecuar sus negocios a la nueva ley antitabaco.

Sanciones de hasta 600.000 euros

Si a partir de enero pillan a una persona fumando en un lugar no habilitado para ello de un hotel o un bar, los dueños del local se enfrentarán a sanciones de entre 300 y 600.000 euros (en los casos más graves y con reincidencia), mientras que el fumador sólo pagaría una multa de 30 euros. Los empresarios lo consideran injusto, porque dicen que «la ley nos convierte en policías de nuestros clientes». Marco Martínez, presidente de Disbar, lo critica, ya que «a los bares se viene a beber y fumar».