La Policía detiene a tres menores como autores de los ataques a los autobuses urbanos de Ceuta

La Jefatura Superior del Cuerpo Nacional de Policía ha puesto a disposición de la Fiscalía de Menores a tres jóvenes de 14 y 15 años de edad como presuntos autores de los sabotajes y ataques sufridos durante las últimas semanas por los autobuses urbanos que llegan hasta la barriada periférica del Príncipe Alfonso de Ceuta y de las amenazas e insultos vertidos sobre sus conductores. Además, los agentes han informado al Ministerio Fiscal del arresto de otros jóvenes, menores de edad penal (14 años), acusados de los mismos delitos.

Según detalló la Polícia Nacional a través de un comunicado de prensa, todos los arrestados son de etnia magrebí, naturales de Ceuta y vecinos de la barriada del Príncipe Alfonso.

Los incidentes por los que se acusa a los jóvenes se reiniciaron a mediados del mes pasado, cuando empleados de la empresa de autobuses urbanos denunciaron los daños ocasionados en sus vehículos por varios menores que extrajeron los plafones de luz del vehículo, molestaron "reiteradamente" al resto de usuarios y distrajeron al chofer.

Según el primer atestado policial, a media ruta el conductor se detuvo y requirió el auxilio de los miembros de la Comisaría de la Policía Nacional, cuyos efectivos instaron a los alborotadores a bajar del autobús. "En la creencia de haber solucionado el problema, el conductor continuó su ruta", indicó la Jefatura.

Al día siguiente, en idéntico lugar y hora, los mismos jóvenes subieron al coche y se encararon con su conductor, el mismo de la jornada anterior, al que "insultaron y amenazaron" hasta que se apearon después de fracturar los cristales de las ventanillas traseras.

Días después se tramitaron otras dos denuncias, en el primer caso tras la rotura de las lunas traseras de otro vehículo y en el segundo a raíz de la fractura y extracción de los cristales del automóvil, lo que obligó al piloto a "detener el autobús y retirar los vidrios de la carretera para no perjudicar a otros usuarios, dirigiéndose a garajes para reparar los desperfectos".

Miembros del Servicio de Atención a la Familia de la Jefatura ceutí, que entre sus competencias contempla el esclarecimiento de hechos cometidos por menores, inició investigaciones y entrevistó al aludido conductor acerca de las características, hábitos e indumentarias de los clientes descritos, datos con los que se logró su identificación.

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