Para el rodaje se construyó un avión de 90 metros en 16 semanas. Un pequeño aeropuerto en el desierto de Mojabe y otro en Berlín fueron los lugares donde se situaron las localizaciones exteriores.

Foster regresa así a las pantallas después de llevar un tiempo sin prodigarse mucho por la cartelera. El año pasado se la pudo ver en un pequeño papel a las órdenes de Jean Pierre Jeunet (Un largo domingo de noviazgo). Anteriormente llevaba desde 2002 (La habitación del pánico) sin protagonizar una gran producción.

La actriz, galardonada con un Oscar por la celebrada película El silencio de los corderos, en la que compartía el protagonismo con Anthony Hopkins,  parece volver a despegar con proyectos como Inside Man, Sugarland o The Brave One, cuyos rodajes la mantendrán más que ocupada en los próximos años.

Compañeros de reparto

Junto con ella están en Plan de vuelo actores que no gozan de excesiva popularidad, pero cuyos rostros son de sobra conocidos para el público. Peter Sarsgaard ha aparecido recientemente con Liam Neeson en Kensey y de Kate Hudson en La llave del mal. El otro compañero de reparto, Sean Bean, fue Boromir en El señor de los anillos.

* EE UU, 2005. Dir.: Robert Schwentke. Int.: Jodie Foster, Peter Sarsgaard, Sean Bean. Dur.: 93 min.

 Si tienes que volar, pasa de...

El miedo a volar está bastante extendido, y  el cine no ha ayudado a que desaparezcan estos temores. La saga Aeropuerto, que comenzó en 1970, y sus secuelas fue la primera en asustar al personal. Luego se repitieron las tramas sobre secuestros y terroristas como en Pasajero 57, con Wesley Snipes convertido en  héroe espontáneo, o Decisión crítica (1996), con Kurt Russell. Aunque la que más respeto da es ¡Viven!, basada en un accidente real en los Andes. ¿Quién no recuerda el ‘festín’ de los pasajeros?

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