En esta línea, Carro indicó que la situación es "extrema" porque los pescadores, aunque no salen a faenar por las condiciones metereológicas, "siguen dados de alta y no cobran el desempleo", motivo por el cual la tripulación está "nerviosa". Si se mira al cielo, tal y como señaló el armador, las previsiones son "malas porque no dejan de entrar borrascas".

En cuanto a la petición de ayudas a la Consejería de Agricultura y Pesca de la Junta de Andalucía, donde el sector de arrastre de la flota pesquera del Golfo de Cádiz registró la pasada semana un escrito en el que solicitan ayudas extraordinarias para la tripulación y armadores para paliar las pérdidas del temporal y el tiempo de parada biológica, Carro indicó que "aún no han obtenido respuestas ni buenas ni malas", aunque son conscientes de que la Consejería está "saturada".

A su vez, Antonio Carro criticó que la Junta "no les diera permiso para faenar el pasado lunes, festivo por el día de Andalucía, ya que aunque era día de fiesta y no se podía, las condiciones de este año son especiales y excepcionales", indicando además que la situación es "muy complicada para afrontar los pagos a los proveedores", así como los gastos de la Seguridad Social que tienen que abonar los armadores.

Antonio Carro apuntó que son "circunstancias del mar y no vale la pena arriesgar la tripulación y las embarcaciones", pero confió en que la primavera sea "mejor y tengan más posibilidades de faenar", a la par que matizó que será "difícil" recuperar las pérdidas ocasionadas por el temporal que azotó a la península durante los últimos meses.