"Todos nos preguntamos si lo que busca el Gobierno no es contrastar las ideas de otros, sino que colaboremos con nuestro silencio para que ellos puedan seguir con sus viejas políticas", señaló durante la conferencia titulada 'El futuro de España y nuestra capacidad para salir adelante', dentro del Foro del diario 'La región de Ourense'.

En este sentido, la dirigente popular aseguró que el Ejecutivo "ni quiere cambiar de políticas ni está dispuesto a rectificar sus errores". En este sentido, hizo un repaso de las iniciativas puestas en marcha por el Gobierno para censurar el "batiburrillo de medidas exclusivamente paliativas, cortoplacistas y con efectos muy limitados" que supuso la puesta en marcha del denominado 'Plan E', así como el "cajón desastre" que supone la Ley de Economía Sostenible.

En cuanto a la oferta de pacto de Estado para salir de la crisis, la portavoz parlamentaria del PP subrayó que su partido "es amigo de los pactos" aunque "lo es más de la verdad" y, en este sentido, definió el documento de medidas del Gobierno como una "oferta vagorosa en sus perfiles, incierta en su alcance e imprecisa en sus destinatarios".

En este sentido, recordó que la situación "pide liderar profundos cambios estructurales" como ofrece el PP. En primer lugar, subrayó la necesidad de acometer una "profunda reforma laboral" desde la "responsabilidad y no desde la demagogia". "Será imposible crear empleo en España", subrayó la portavoz parlamentaria popular, "mientras Zapatero no pierda el suyo".

Sobre este punto, recordó que el Gobierno "lo único que ha hecho" en este sentido "es sugerir unos puntos para la reforma y dejar la pelota en el tejado de los sindicatos y empresarios". "Más que un diálogo social, parecerá una tertulia", incidió.

En segundo lugar, Sáenz de Santamaría reclamó nuevamente la bajada selectiva de impuestos y recordó que una subida del IVA, tal y como plantea el Ejecutivo, no incentivará el consumo. En tercer lugar citó la reforma educativa como uno de los pilares fundamentales sobre los que apoyar el nuevo modelo de crecimiento sostenible y explicó que, si bien la propuesta de pacto del Ejecutivo contiene algunos planteamientos en los que podrían llegar a acuerdos, "falla todavía en lo fundamental".

"Resulta decepcionante comprobar cómo este Gobierno, todo un Gobierno de España, duda en su voluntad de garantizar al enseñanza en castellano en todo el territorio nacional, en equilibrio con las lenguas cooficiales, no tiene interés en garantizar el derecho de los padres a elegir la educación de sus hijos y vacila en llevar a cabo las reformas legislativas para impulsar, de una vez por todas, la calidad de la educación", explicó.

Fomentar la innovación en la empresa y una reforma de las Administraciones Públicas basada en la austeridad y el aprovechamiento de las "bondades" de la "España de las autonomías" fueron otros de los aspectos que citó como "cruciales" y "fundamentales".

No obstante, se mostró convencida de que se puede salir de la crisis y "se puede salir reforzado". "Nuestra crisis tiene solución, lo que no la tiene es el Gobierno del señor Zapatero", subrayó.

España será el último en salir de la crisis

En esta línea crítica con el Ejecutivo, Sáenz de Santamaría recriminó al Gobierno su falta de reacción ante la difícil situación económica y se mostró convencida de que esa circunstancia conllevará que España sea el último país en salir de la crisis. "Seremos los últimos en salir de la crisis porque Zapatero fue el último en reaccionar frente a ella. Y saldremos con más daños porque nuestro Gobierno sigue cometiendo errores en su gestión".

La portavoz parlamentaria del PP quiso durante el acto hacer "eso que le cuesta tanto a Zapatero", llamar a las cosas por su nombre —porque sin conocer el punto de partida, es imposible encontrar la ruta hacia ningún destino, recordó—, para ilustrar la situación económica, un retrato "desgraciadamente sombrío".

En este sentido, recordó que España lleva siete trimestres en recesión, el balance fiscal "desastroso" porque el Gobierno gasta el doble de lo que ingresa, el "crecimiento vertiginoso de la deuda pública —al Gobierno hoy le preocupa más colocar en los mercados casi medio billón de euros de deuda que colocar a más de cuatro millones de parados, le recriminó— y un paro que duplica el que se registra en el entorno económico de España, lo que une el drama económico a un drama social.

"En definitiva", resumió Sáenz de Santamaría, "un drama humano para los jóvenes que salieron de casa de sus padres con los Gobiernos del PP y ahora tienen que volver a ella con el Gobierno de Zapatero". "Esta es la realidad tan distinta de las efímeras fantasías, de los envoltorios de celofán con los que el Gobierno una y otra vez la viene enmascarando", concluyó.