"¡Fuera de Carabanchel!", era el grito de guerra del grupo de vecinos que se reunió este domingo en la plaza de la Emperatriz, en el madrileño barrio de las afueras de la capital, para conmemorar los cuatro años de lucha contra el Servicio de Estacionamiento Regulado (SER).
La celebración tenía un aire festivo, con brindis, cánticos y caras alegres. No en vano, hace apenas unos días, el pasado 24 de febrero, el colectivo obtuvo una pequeña victoria en su particular guerra contra el Ayuntamiento de Madrid. Ese día, el Juzgado de lo Contencioso Administrativo anuló una multa de un parquímetro a Pedro Casas, vecino de Carabanchel Alto y líder del movimiento antiparquímetro, basándose en una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Madrid que declaraba nulo el SER en los barrios de las afueras.
Parquímetro, "ilegal"
Por tal sentencia, durante la protesta de este domingo, los vecinos del barrio ‘vistieron’ con traje de presidiario cada uno de los parquímetros de Carabanchel, con bola de preso incluida, al tiempo que colocaban una careta con el rostro de Ruiz Vampirón y un letrero donde se podía leer: "Ilegal".
La Asociación de Vecinos de Carabanchel Alto prometió este domingo no abandonar la lucha, y animó a todos los vecinos de Madrid a reclamar al Gobierno municipal el dinero recaudado con sus sanciones.
El jueves, cumpleaños gigante
Este domingo lo celebraba únicamente Carabanchel Alto, pero el próximo jueves, el resto de colectivos y asociaciones vecinales que luchan contra los parquímetros de la capital se juntarán en una manifestación en la plaza de Cibeles para conmemorar sus cuatro años de protestas. También ofrecerán datos sobre el dinero "ilegal" recaudado por el Consistorio durante este tiempo.
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