Los servicios de emergencias de Cantabria han coordinado, desde las 12.00 horas de hoy —hora de activación de la alerta naranja— hasta las 21.00 horas un total de 408 incidencias y han recibido 1.796 llamadas telefónicas sobre fenómenos adversos. Hasta el momento no se han producido daños personales pero sí "cientos" de "pequeñas incidencias" que están siendo atendidas por un dispositivo en el que trabajan entre 800 y 900 personas.

Así lo informó a las nueve de la noche de hoy el consejero de Presidencia y Justicia, Vicente Mediavilla, en una rueda de prensa en la que estuvo acompañado por el director general de Protección Civil, José Luis Gochicoa, y en que la indicó que la alerta roja continúa en toda Cantabria hasta las 05.00 horas del domingo, periodo en el que se esperan rachas máximas de 140 km/h en toda Cantabria, que pueden llegar a los 150 km/h en Campoo.

Igualmente continúa la alerta naranja por fenómenos adversos en la mar hasta las 05.00 horas y se esperan vientos de fuerza 8 con rachas de hasta fuerza 11.

Las zonas que más incidencias han registrado son Santander, Cabezón de la Sal, Camargo, Medio Cudeyo, Liébana y Selaya y Molledo, estas dos últimas, ahora sin luz.

Las racha máxima de viento, 145 kilómetros por hora, se ha registrado en Reinosa, mientras que en Santander y la costa ha habido rachas de entre 100 y 105 kilómetros por hora. Sin embargo, el consejero advirtió que se espera que viento más fuerte en el litoral entre las 22.30 y las 23.00 horas.

Las incidencias más graves hasta el momento se han registrado en San Roque de Riomiera, donde el viento voló el tejado de una vivienda; en Santander, donde ha levantado la cubierta del colegio Ángeles Custodios, y en la fábrica de Nestlé en La Penilla, donde se han caído cables eléctricos. Además, también se ha caído una torreta de alta tensión en la CA-142, a la altura de San Salvador dirección Sarón.

Mediavilla también informó que el deshielo producido por el fuerte viento Sur especialmente en la zona de Liébana ha provocado problemas de crecida en el río Deva y sus afluentes, tanto el cauce alto como la parte baja. Hay zonas de Potes con "pequeñas inundaciones" en viviendas y posadas rurales, y en Vega de Liébana los bomberos de Tama han tenido que realizar un dique de contención para evitar el desbordamiento.

Igualmente se han registrado numerosas caídas de árboles en la calzada y de andamiajes en Santander, Cayón, Camargo, etcétera.

El consejero indicó que a las ocho de la tarde se ha activado el nivel 1 del Plan Territorial de Emergencias, lo que ha supuesto la constitución del Centro de Coordinación Operativa en el 112. Se ha reforzado la sala del 112, que ahora atienden 12 personas y aún sí "no dan a basto", se han reforzado los parques de emergencias y están activadas las 36 agrupaciones de Protección Civil.

En total, entre bomberos, Protección Civil, Guardia Civil, SOS Cantabria y Policía Local, entre 800 y 900 personas están trabajando por los efectos del temporal.

Mediavilla auguró una noche "larga", con "cientos de incidencias", pero consideró que los servicios de emergencias están respondiendo "de forma consecuente, como esperan los cántabros".