Según informó el sindicato, un trabajador que se desplaza cada día al polígono Pla-Za en vehículo privado puede gastar hasta 300 euros mensuales, "una cifra que no está al alcance de muchos de los empleados de hostelería y comercio colocados en el centro comercial".

Por ello, CC.OO. reivindicó hoy "una solución más sostenible personal, social y ambientalmente" a través de un estudio elaborado por el Instituto Sindical de Trabajo, Salud y Ambiente de la central donde se analizan tanto las necesidades como las posibles soluciones.

En el mismo, el sindicato recabó la opinión de 920 trabajadores del polígono y de 21 empresas ubicadas en él, lo que le permitió realizar una fotografía "muy enfocada" de la realidad, con un margen de error del cuatro por ciento.

Una de las primeras conclusiones del trabajo, según señaló en rueda de prensa en Zaragoza el técnico de ISTAS Albert Vilalloga, es lo "poco atractivo" que resulta a día de hoy el único medio público de transporte existente: la línea de autobús que va al aeropuerto y que tiene parada en el polígono.

Según señaló, los usuarios tienen la percepción "adecuada" de que resulta más caro ir en esta línea que en coche privado, ya que el coste por billete es de 1,60 euros, sin posibilidad de interconexión con la red urbana de Tuzsa y con una inversión de tiempo mucho mayor: de sesenta minutos, frente a los veinte del coche.

Mejorar el servicio

Así, la primera medida a adoptar para CC.OO. sería mejorar un servicio "deficiente y precario" que no requiere de una inversión importante para su puesta en marcha.

En este sentido, apuntó la necesidad de mejorar la información que se ofrece en los postes de las paradas, dotar de marquesinas a las mismas para protegerse del sol y el frío, adecuar los horarios a los ritmos laborales y facilitar la compra de tarjetas multiviaje con integración tarifaria con el resto de servicios de la ciudad.

A pesar de todo, el 17 por ciento de los trabajadores del polígono están haciendo uso del mismo y el número de usuarios de la línea ha pasado de 5.000 en 2004 a 500.000 en 2009. No en vano, un 23 por ciento de los trabajadores carece de vehículo propio.

Para el mejor funcionamiento del servicio, el estudio apunta a la puesta en marcha de una lanzadera interior que reparta a los trabajadores por el polígono y la implantación de tres líneas diferentes desde la ciudad que partan desde tres puntos estratégicos repartidos para aglutinar la afluencia de la mayoría de los usuarios.

Más a largo plazo, abogó por la integración de un servicio ferroviario dentro de las Cercanías de Zaragoza aprovechando el vial de ancho ibérico existente para el que sólo sería necesaria la construcción de un apeadero.

Según indicó el secretario general de CC.OO. Aragón, Julián Buey, estas necesidades de transporte de los trabajadores son responsabilidad de la Administración y de los propios empresarios, que "no pueden plantear la construcción de un polígono con todos los servicios esenciales como la luz, el agua o las carreteras y olvidar las necesidades de las personas que trabajan allí". Por ello abogó por la financiación conjunta de las mejoras, en tanto que benefician tanto a las empresas como a la sociedad.

Según datos del sindicato, hasta un diez por ciento de las personas que se desplazan a Pla-Za han sufrido algún tipo de accidente de tráfico, de los cuales más del noventa por ciento corresponden a desplazamientos al trabajo o 'in itinere'. En este sentido, Buey reivindicó los beneficios que supondría rebajar esta siniestralidad en horas de trabajo y gasto público y criticó al Gobierno de Aragón "que ha demostrado en este sentido una sensibilidad bastante baja".

Finalmente, el responsable de Medio Ambiente de CC.OO. Aragón, Luis Clarimón, expuso las reivindicaciones de la central: la introducción de la figura del "gestor de movilidad" como especialista en materia de desplazamientos para polígonos de gran tamaño.

Además abogó por la constitución de una "mesa de la movilidad" en la que la Administración, los trabajadores y las empresas discutan las medidas a adoptar y su viabilidad y el desarrollo de los planes de movilidad en las empresas, que cuentan además con posibilidad de financiación público. "Este es un polígono bastante nuevo y debe ser ejemplo de como se deben hacer las cosas", concluyó.