Las empresas papeleras vascas han disminuido su huella de carbono en un 13,95 por ciento en los últimos cuatro años, según aseguró hoy el Cluster del Papel de Euskadi en un comunicado.

El Cluster indicó que, según el estudio 'Mejorando la sostenibilidad del sector del papel' que ha realizado con la colaboración de Factor CO2 Ideas para estudiar los gases causantes del efecto invernadero, huella de carbono, en el sector, en el periodo 2005-2008, las papeleras vascas han pasado de emitir 0,43 toneladas de CO2 por cada tonelada de producto (pasta y papel) fabricada en 2005 a las 0,37 de 2008.

Según señaló, esta disminución de la huella de carbono de la industria papelera vasca ha sido posible, además de por "mejoras en los procesos de producción implantadas en los últimos años", gracias al "impacto positivo de la utilización de la biomasa con fines energéticos, la cogeneración para la producción de energía, el reciclaje de papel y su función como almacén temporal de carbono".

A su juicio, sin la confluencia de estos factores, la huella bruta de carbono "habría alcanzado las 1,11 toneladas de CO2 por cada tonelada de producto fabricada en 2008".

El Cluster destacó que el conocimiento actual de la huella de carbono ha permitido "hacer una prospección y corroborar el potencial de reducción de gases de efecto invernadero del sector, gracias precisamente a la tendencia a una mayor utilización de la biomasa como combustible y de la cogeneración para la producción de energía".

En cuanto al informe 'Mejorando la sostenibilidad del sector del papel' puntualizó que tiene como objetivo conocer las emisiones de GEI que se producen a lo largo de todo el ciclo de vida del proceso productivo, así como el impacto climático por unidad de producto, a fin de poder compararlo con el impacto climático de otros productos.

En este estudio participó el 81,25 por ciento de las empresas fabricantes de pasta y papel vascas, lo que supone el 84,17 por ciento del total de emisiones de CO2 del sector papel.

El Cluster explicó que para calcular la huella de carbono del papel fabricado en Euskadi se han identificado y cuantificado no sólo las propias emisiones generadas en la producción de pasta y papel, debidas al uso de combustibles y al consumo de electricidad, sino también las emisiones en el transporte, tanto a la hora de comprar materias primas como de vender productos terminados, las de la producción de las materias primas así como las generadas por incineración o deposición en vertederos en el fin de vida del papel.

En Euskadi las instalaciones papeleras, que suponen el 24 por ciento de las instalaciones reguladas por el

Eu ets (Comercio de Derechos de Emisión), constituyen tan sólo el 5,2 por ciento de las emisiones de las mismas. Además, en términos de emisiones de CO2, principal gas de efecto invernadero (GEI), las emisiones directas del año 2008 de las empresas del sector papel supusieron el 2,11 por ciento del total de las emisiones de GEIs generadas en el País Vasco.

El Cluster destacó que, teniendo en cuenta que el consumo 'per cápita' de papel en la Unión Europea UE es de 193,4 kilogramos, la huella de carbono asimilable a ese consumo sería de 214,67 kilos de CO2 si consideramos el dato bruto y de 71,56 kilos si nos atenemos a la huella neta de carbono del papel.

"menor impacto ambiental"

En este sentido, el Cluster destacó que sólo las emisiones por consumo de combustible de un automóvil que recorriera 7.000 kilómetros al año (distancia media recorrida por un automóvil según Ministerio de Fomento) alcanzarían los 840 kilos de CO2 siempre y cuando éste emitiera solamente 120 gramos de CO2 por kilómetro recorrido, límite que quiere aplicar Bruselas a las emisiones de coches a partir de 2012.

A su juicio, estos datos demuestran "el menor impacto ambiental del uso del papel frente a otras actividades típicas en nuestras sociedades actuales".