De este modo, los 300 asistentes a dicha asamblea respaldaron la propuesta realizada por el secretario general del PSOE granadino, José María Rueda, de apoyar la elección de Griñán como nuevo líder del socialismo andaluz, lo que según indicó Rueda en una nota, "supone un espaldarazo a la nueva etapa que se abre para el PSOE y para la sociedad andaluza con la celebración del Congreso".

Para el máximo responsable socialista en la capital, Andalucía tiene retos "importantes" de cara al futuro, como "afrontar la salida de la crisis económica, el cambio de modelo productivo y la defensa a ultranza de los derechos y libertades conquistados por nuestra ciudadanía, tras la etapa más fructífera de gobierno socialista en nuestra región, como los derechos sociales, el derecho a una educación de calidad, el derecho a la igualdad real y el derecho a la vivienda".

Todos esos retos, en opinión de Rueda, precisan una organización "fuerte y unida" en torno al liderazgo de Griñan, y en esa línea se pronunciaron los socialistas de la ciudad, "en un ejercicio de responsabilidad colectiva y de compromiso con la gente que sigue confiando en el PSOE", declaró.

Respecto a la elección de delegados para el Congreso Provincial, se presentaron dos candidaturas. La encabezada por el secretario general, José María Rueda, en la que figuraban, entre otros, la secretaria de organización, Maria del Mar García Mortales, el recién elegido presidente de Caja Granada, Antonio Jara, y la portavoz municipal, Carmen García Raya, que obtuvo el 73 por ciento de los votos emitidos. Por su parte, la encabezada por Juan González Badía-Fraga, en la que figuraban, entre otros, Sara Susana Martínez y César Girón, obtuvo el 26 por ciento de los votos.

En virtud de la normativa interna del PSOE, la lista de Rueda se hizo con 22 de los 30 delegados en liza, mientras que a la liderada por González Badía le corresponden ocho delegados.

Por otra parte, el clima en el que se desarrolló la asamblea, según manifestó Rueda, fue de "absoluta normalidad democrática" y de "grandes expectativas" ante el futuro al que se enfrenta el socialismo andaluz, "lleno de retos y de ilusión colectiva".