Se trata de distinciones previstas en la Real Orden de Reconocimiento Civil de las Víctimas del Terrorismo, con las que se rinde homenaje a los fallecidos en atentados terrorista, heridos y secuestrados.

Concretamente hoy recibieron una condecoración extremeños que sufrieron la agresión terrorista entre 1974 y 2004, en atentados de ETA, los GRAPO, el ataque islamista a Madrid del 11 de marzo de 2004 y durante el conflicto del Sahara.

Entre los condecorados miembros de la sociedad civil, empresarios y representantes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, destacando los 5 miembros de las familias González Ruiz heridos en el atentado de ETA ocurrido e. 11 de diciembre de 1987 en la Casa Cuartel de Zaragoza.

Estuvieron presentes en el acto de entrega la delegada del Gobierno, Carmen Pereira; el director general de Apoyo a las Víctimas del Terrorismo, José Manuel Rodríguez Uribes; la vicepresidenta primera de la Junta de Extremadura, Dolores Pallero, el alcalde de Badajoz, Miguel Celdrán, y el ex-presidente extremeño Juan Carlos Rodríguez Ibarra, entre otras autoridades y representantes políticos y civiles.

En su turno de intervención Rodríguez Uribes destacó que estas condecoraciones son un acto de "justicia y reconocimiento" para todas las víctimas del terrorismo como muestra de "sincero y sentido homenaje".

El director general subrayó también que el sistema normativo español de solidaridad con las víctimas del terrorismo es "probablemente el más completo del mundo" por las ayudas que establece y el reconocimiento que ofrece a víctimas y familiares.

Por su parte, Carmen Pereira señaló que "no puede combatirse el terrorismo sin mantener viva la memoria de las víctimas" y que en el horizonte "debe estar siempre su causa, porque es la causa de la justicia" y sus derechos que representan el derecho a la vida y a la integridad física y moral