En momentos en los que sólo se escuchan noticias pesimistas, es difícil mantener una actitud positiva durante la búsqueda de empleo. Creade Lee Hecht Harrison, una consultora de carreras profesionales, propone 10 consejos para que el desánimo no cunda entre los profesionales que se han quedado en paro y se disponen a buscar otro empleo.

"El objetivo-dicen- no es encontrar cualquier trabajo, el objetivo es continuar con éxito la trayectoria profesional, y eso nunca se construye con una visión a corto plazo".

Por eso, se propone:

1. Pensar bien qué hacer con la indemnización, controlar los gastos y prepararse para 1 año de búsqueda.

2. Buscar trabajo es un trabajo en sí mismo y requiere de estrategia, esfuerzo y disciplina.

3. No obsesionarse con encontrar únicamente un trabajo, hay que enmarcar la  nueva situación dentro del propio proyecto vital.

4. No perder los hábitos que dirigían la vida personal. Marcarse unos horarios y establecer  una serie de rutinas diarias que hagan sentirse vivo.

5. Aprovechar el tiempo para disfrutar de la familia, amigos y aficiones. Todo aquello que antes se echaba de menos y no se hacía por falta de tiempo.

6. El deporte puede ayudar a sentirse más ágil, física y mentalmente. Buscar el que mejor encaje con los propios gustos y motivaciones.

7. ¿Hacia dónde ir? No hay que perderse. Un objetivo para ser consistente es ser realista y tener en cuenta tres conceptos:

- Qué sé hacer y qué puedo hacer; cuál es mi experiencia y mis puntos fuertes.

- Qué es lo que más me gusta hacer.

- Analizar qué es lo que el mercado demanda y cómo se adaptan las propias experiencias y motivaciones a él.

8. Abrir las expectativas a otros sectores, puestos y zonas geográficas.

9. No caer en la frustración. Ser consciente de lo que se necesita y de lo que se desea, y no  confundirlo.

10. Soñar y sé generoso con uno mismo. Mimar el tiempo, dedicarlo a objetivos y prioridades. No juzgar, las cosas son lo que son, pero, según la interpretación que les demos, adquieren nuevos matices. Permitirse disfrutar de cada día, que no es poco.