Hasta ahora sólo podían repostar en ellas los socios  de la cooperativa. Sin embargo, el jueves pasado el Congreso aprobó un proyecto de ley que da vía libre a estas organizaciones para suministrar carburante a cualquier usuario.

Gracias a esta medida, los conductores podrán llegar a ahorrarse entre uno y seis céntimos por litro de carburante.

Algunas cooperativas, como la de Algemesí o L’Alcúdia, ya suministraban gasolina a terceros porque tienen la estación de servicio fuera de la cooperativa (aunque a los socios se la dejan más barata).

Otras, como la de Carlet, que tiene la gasolinera dentro de la cooperativa, podrán venderla a los no socios a raíz de esta iniciativa.

Se venderá más y caerá el precio

En todo el país existen 700 cooperativas agrarias que venden carburante en sus propias gasolineras. La Confederación de Cooperativas Agrarias de España (CCEP) prevé aumentar sus ventas entre un 35 y 40% y auguran que los precios del combustible van a sufrir una reducción ante esta medida. El proyecto está aprobado, pero falta que se publique en el BOE.