De Lorenzo dice que le gustaría igualar los 32 años de mandato de su tocayo, el arzobispo emérito Díaz Merchán

El nuevo arzobispo le replica que él no desea durar mucho en el cargo, sino desempeñarlo con "jovialidad y juventud"

El alcalde de Oviedo, Gabino de Lorenzo, dijo hoy que le gustaría igualar los 32 años que su tocayo, el arzobispo emérito de Oviedo, Gabino Díaz Merchán, estuvo en el cargo. "Los Gabinos tenemos un secreto sobre la longevidad en el cargo; el que quiere aprender, que estudie", comentó.

De Lorenzo hizo estas declaraciones hoy en Oviedo durante el acto de inauguración de la escultura 'La Maternidad' -obra de Esteban Miranda- en la nueva plaza Carlos Osoro, en el barrio de La Florida. Al acto asistieron el propio Osoro, el actual arzobispo de la ciudad, Jesús Sanz Montes; el alcalde de Santander, Iñigo de la Serna y el delegado del Gobierno en Asturias, Antonio Trevín entre otras autoridades civiles, judiciales y eclesiásticas.

Antes del descubrimiento de la placa conmemorativa, De Lorenzo definió a Osoro como "una gran persona y un gran arzobispo que los ovetenses tuvieron la suerte de tener durante unos breves pero intensos siete años". A su juicio, el antiguo arzobispo de Oviedo desplegó "una ingente labor pastoral en Asturias caracterizada por su cercanía a la gente". "Ha pateado Asturias de norte a sur y de este a oeste y ha estado siempre donde se le necesitaba", valoró.

Para el regidor, con la llegada de monseñor Jesús San Montes a Oviedo, la archidiócesis queda "en magníficas manos". Antes de concluir, le deseó "salud y suerte" para conseguir éxito en su "difícil trabajo".

Durante su intervención, Sanz Montes le replicó que no es la longevidad en el cargo lo que le suscita deseo, sino la juventud en el ánimo y la jovialidad en el desempeño del mismo. Asimismo, se refirió a su antecesor en el cargo como "un buen hermano y buen amigo" que llevó a cabo una labor intensa en los pocos años que estuvo en Oviedo y dijo que Osoro le suscita "el amor a la vida que se puede custodiar y anunciar".

El nuevo jefe de la Iglesia asturiana bromeó ante la advertencia de la existencia de cuélebres en Asturias asegurándole al alcalde que si alguna vez lo descubre "se lo hará saber". "Esta misma noche miraré debajo de mi cama", aseguró. De Lorenzo, por su parte, se mostró convencido de que Sanz encajará en Oviedo porque "tiene la misma retranca que los asturianos".

Una plaza para los hombres de iglesia

El homenajeado Osoro se definió como un hombre "de Iglesia", "testigo, enviado y representante del señor" y ofreció la plaza que lleva su nombre "a todo el Prebisterio Diocesano asturiano". "Acojo la plaza a mi nombre pero se la entrego al señor para que sea una plaza de hombres de Iglesia", subrayó. En sus palabras de agradecimiento hizo mención a la Virgen de Covadonga, ante la que "pensó y repensó" numerosas decisiones durante los siete años que estuvo en el Principado.

Por su parte el alcalde de Santander repasó los vínculos que unen a las capitales asturiana y cántabra y valoró los méritos profesionales y humanos que convierten a Osoro en merecedor de una plaza. Ante las bajas temperaturas que se registran hoy en la ciudad, De la Serna aseguró que "lo que no hagan con él el Racing de Santander y el frío de Oviedo, no lo hará la oposición".

La idea de dedicarle una plaza a Osoro surgió de la Hermandad de Jesús Cautivo, quienes iniciaron una recogida de firmas, a la que se adhirieron miles de ovetenses solicitándole al Consistorio dicha concesión. La glorieta, en la que se yergue la figura 'La Maternidad' se ubica en La Florida, próxima a la que la ciudad le dedicó al arzobispo emérito, Gabino Díaz Merchán.

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