El director de la representación de la Comisión Europea en España, Francisco Fonseca Morillo, destacó hoy que la Unión Europea (UE) "tiene que estar presente en las competiciones deportivas". "Sólo será algo más que la unión de 27 países, si somos capaces de crear una dimensión europea en todos los grandes eventos", subrayó.

Fonseca se expresó así hoy durante el recibimiento del velero 'Traité de Rome', que se encuentra en Valencia en el marco de la inauguración de la Presidencia española del Consejo de la UE durante el primer semestre de 2010, y que más tarde visitará Barcelona y Vigo. En el acto, también estuvo presente el secretario autonómico de Relaciones con el Estado y la UE de la Generalitat, Rafael Ripoll.

En un primer momento, estaba prevista la presencia del secretario de Estado para la Unión Europea, Diego López Garrido, sin embargo, debió regresar al Parlamento de Estrasburgo por motivos profesionales.

Por otra parte, el representante de la Comisión Europea manifestó que Europa se ha creado "sobre la base de su fachada marítima". Así, Fonseca indicó que el "espíritu europeo" se había configurado a través del Mediterráneo, y puso como ejemplo la voluntad de comercio de los fenicios y la conquista de los territorios que bordeaban el Marenostrum, "de aquello que había más allá del horizonte", precisó. "E igualmente— continuó Fonseca— ese mismo espíritu marítimo llevó al descubrimiento de América".

Además, el representante europeo puso en relieve la "importancia" de la fachada mediterránea para Valencia, "no sólo por la copa América", y añadió que por ello "es algo muy simbólico que la primera parada en España del velero haya sido precisamente esta ciudad".

En palabras del director, el 'Traité de Rome', que lleva este nombre debido al tratado que sentó las bases de la Unión Europea, tiene un "importante valor solidario", pues ocupa "una gran parte de su tiempo como velero-taller para la juventud europea, a la que a través de la vela, se puede educar en valores como la disciplina, el trabajo en equipo y el conocimiento de otros países", concluyó Fonseca.

Por otra parte, Rafael Ripoll calificó la mañana de hoy de "histórica", pues, como él comentó, "hoy coinciden varios acontecimientos a los que el Gobierno valenciano quiere dar la bienvenida: por un lado, se inicia una nueva edición de la Copa América y, con ella, una nueva edición del espíritu emprendedor hecho realidad, hecho deporte. Y, por otra parte, estamos prácticamente celebrando la entrada en vigor del tratado de Lisboa".

"europeización de la sociedad valenciana"

En palabras de Ripoll, lograr "la europeización de las costumbres y la ciudadanía valenciana", y conseguirla "de la mano de una competición deportiva", es una "simbiosis" que el Gobierno valenciano "quiere poner sobre la mesa, y así dejar evidencia de que lo deportivo es capaz de unir a los pueblos, de aunar las distintas sensibilidades y trazar un camino común".

"Desde ese punto de vista —prosiguió Ripoll— el Tratado de Lisboa, que acaba de entrar en vigor, hace referencias expresas a la cuestión de las competiciones deportivas entre los estados miembros". Para el secretario autonómico, esto supone "una posibilidad más de lograr la integración en la UE, como ya se ha aplicado en otros ámbitos con medidas macroeconómicas o comerciales".

En palabras del dirigente 'popular', la Generalitat "está encantada, porque la promoción de los grandes eventos deportivos es una línea estratégica seguida por el gobierno valenciano en el mundo y en Europa". Así, para Ripoll, que el tratado de Lisboa "esté promocionando algo que la Generalitat ya está llevando a cabo, llena de satisfacción al Gobierno valenciano y traza un camino de futuro que concurre en esa simbiosis entre los deportivo y lo europeo".

Por último, Ripoll agradeció a la Comisión Europea el traer este velero a Valencia, eligiendo la ciudad como una de las "tres únicas paradas" de la embarcación, en una "pauta más de colaboración y acción común con la UE".

El 'Traité de Tome', fue construído en 1975 año en el que ganó el 'Admiral's Cup', con el nombre de 'Pinta'. Dos años después, su dueño lo cedió a la asociación 'Sail for Europe', que lo empleó en dos ediciones del 'Whitebread Round the World Rce', la antigua Volvo Ocean Race, competición a la que asistirá como velero invitado en 2011.