La fama les acompañó en sus años de niñez, unos siguen adelante con carreras de éxito, pero existen muchos casos en los que el 'niño prodigio' acaba sumergido en una tragedia personal con el paso del tiempo.

Siempre que se ha debatido sobre la cuestión del menor en la televisión, se ha concluido que los riesgos de una infancia con exigencias, especialmente psicológicas, puede desembocar en trastornos difíciles de superar en la edad adulta.

Muchas veces se ha denunciado el uso de los pequeños como 'objeto' televisivo, haciendo a los padres principales responsables.

En España, son populares los casos de Joselito y Marisol, ambos con grandes problemas personales tras haberse convertido en estrellas juveniles. En EE UU son muchos los niños que, tras haber sido estrellas en plató, pasaron a vivir un infierno, tanto en su etapa de adolescentes como ya adultos; en alguna ocasiones con un final trágico:

Gary Coleman: es uno de los más famosos. De niños, protagonizó la serie Diff'rent Strokes (Arnold, en España). Cuando el sitcom finalizó, en 1986, los problemas se acumularon en la vida de Coleman. Entró en quiebra y tuvo varios problemas con la Justicia, entre ellos, una acusación por golpear a una mujer mientras éste trabajaba como guarda de seguridad.

Dos niños más en la serie Arnold: el caso de Coleman no es el único de niños que participaron en la serie, que acabaron mal. Por un lado, Todd Bridges, quien interpretaba a Willis Jackson, y que tras el sitcom tuvo serios problemas de adicción a la cocaína. También fue acusado de intento de asesinato. Afortunadamente, recondujo su vida y hoy se dedica a dar charlas en universidades advirtiendo a los jóvenes sobre los efectos negativos de las drogas.

Por otro lado está Dana Plato (en el papel de Kimberley Drummond), cuyos problemas con las drogas desembocaron en una sobredosis que acabó con su vida en 1999, cuando tenía 34 años.

Jaimee Foxworth: famosa por su aparición en Cosas de casa (Family Matters). Foxworth acabó arruinada, con depresión y problemas con las drogas. Tuvo que ganarse la vida en el cine porno durante dos años.

Jonathan Bradis: se convirtió en ídolo de las jovencitas gracias a sus papeles en Seaquest y la película Ladybugs. Tras esto sufrió una depresión de la que no se recuperó. Se quitó la vida cuando contaba con sólo 27 años.

Brad Renfro: Impresionó a la crítica internacional con su interpretación en El Cliente (The Client), cuando sólo contaba 12 años. El actor apareció también en otras famosas películas, como Sleepers, en la que interpretaba a un joven Brad Pitt. Sin embargo, la adicción a las drogas acabó con la que podría haber sido una brillante carrera. En 2005, Renfro fue arrestado por posesión de heroína. Tiempo después, en enero de 2008, fallecía a causa de una sobredosis.

Danny Bonaduce: El niño pecoso de la serie The Partridge family también acumula una larga historia de drogas, arrestos y drama en general. Actualmente, trabaja en los medios americanos, pero, si por algo se le ha conocido en los últimos años, ha sido por sus incontables escándalos personales.

Tatum O'Neal: Su interpretación en la cinta Luna de Papel, cuando sólo contaba 10 años, le valió un Oscar, convirtiéndose así en la actriz más joven en ganar un premio de la Academia. Sin embargo, desde que comenzaran sus problemas con las drogas, a la edad de 14 años, la actriz no ha podido levantar cabeza. En 1992, perdía la custodia de sus tres hijos. Volvió a ser portada en junio de 2008, cuando fue arrestada por comprar cocaína.