De la Serna hizo este anuncio durante su visita a las obras de recogida neumática de la calle Alta y entorno, y explicó que la transformación del mercado de México, que ahora "languidece", supondrá el mantenimiento del mercado tradicional y el aumento de la oferta comercial y de ocio, "de forma que se produzca un relanzamiento socioeconómico del eje desde el centro hasta Cuatro Caminos".

De hecho, también se acometerá una "transformación global del entorno", que incluirá el parque anexo al mercado de México y su conexión con la plaza de toros, donde se generarían espacios públicos.

El alcalde indicó que en unos quince días se presentará el estudio de viabilidad definitivo, la solución elegida por el Ayuntamiento, y se explicarán las alternativas que se plantean para el mercado, que pasan "porque exista una oferta comercial y de ocio, haya o no cines, espacio para grandes tiendas y centros comerciales".

En este plazo, el concejal de Comercio y Mercados, Ramón Sainz Bustillo, mantendrá encuentros con los comerciantes. Posteriormente la Junta de Gobierno local aprobará el plan de viabilidad y lo sacará a información pública en marzo. A lo largo de ese mes se podrán presentar alegaciones al estudio de viabilidad, que sería aprobado definitivamente en abril, lo que permitiría aprobar los pliegos para concursar la concesión del espacio. Sin embargo, el concurso público definitivo no se podrá tramitar hasta que el PGOU no esté aprobado.

De la Serna explicó que la actuación no tendrá coste para el Ayuntamiento pues será el concesionario quien ejecute el nuevo edificio, gestione la distribución de los espacios y los comercialice "con las cadenas y empresas que considere". La concesión se plantea a largo plazo, "probablemente 40 años", avanzó. La inversión a realizar dependerá de la solución definitiva y el concurso "se dejará suficientemente abierto" para que las empresas interesadas planteen "un diseño atractivo".

El regidor avanzó que el estudio de viabilidad recoge cuestiones relativas al aparcamiento subterráneo y el mantenimiento y renovación del mercado tradicional. Por su parte, las alternativas contemplan desde la oferta "tipo supermercado", que se incluye en la mayor parte de proyectos similares y que "favorece la compra en el mercado tradicional", según De la Serna, hasta la posibilidad de que "una parte importante" del edificio se destine a comercios, que algunos espacios se reserven a multinacionales comerciales, la existencia de un espacio para ocio, la presencia de cines y lugar para la restauración.