Bienestar Social destina 42,7 millones a la promoción y autonomía de las personas con discapacidad y enfermedad mental

La Conselleria de Bienestar Social destinará a lo largo de este año más de 42,7 millones de euros a la promoción, integración y autonomía de las personas con discapacidad y enfermedad mental de la Comunitat Valenciana, según informó hoy la Generalitat en un comunicado.

El Diario Oficial de la Comunitat Valenciana (DOCV) ha publicado hoy la una orden que recoge una serie de ayudas dirigidas a la atención de las personas con todo tipo de discapacidad, incluyendo a las personas con discapacidad mental crónica, así como a la promoción de la accesibilidad al medio físico.

Concretamente, la Conselleria de Bienestar Social, a través de la publicación de estas ayudas, va a financiar el mantenimiento y sostenimiento de centros de atención a personas con discapacidad, programas de servicios sociales especializados para personas con discapacidad, Prestaciones Económicas Individuales (PEI) para personas con discapacidad, así como la mejora de las condiciones de accesibilidad al medio físico mediante la eliminación de barreras arquitectónicas, urbanísticas y de la comunicación.

Actualmente la Conselleria de Bienestar Social atiende alrededor de 12.000 personas con discapacidad o enfermedad mental crónica en la Comunitat Valenciana. Con el fin de garantizar plenamente los derechos sociales de las personas con discapacidad y los dependientes, la Conselleria subvenciona con esta orden de ayudas los gastos de mantenimiento de centros de servicios sociales especializados.

Concretamente, se financian los gastos de los centros de estimulación precoz o atención temprana, centros de día para enfermos mentales crónicos, centros ocupacionales, centros de rehabilitación e integración social (CRIS), viviendas tuteladas para personas con discapacidad y para personas con enfermedad mental crónica.

Estos programas tienen como objetivo satisfacer, de forma directa, las necesidades especiales de las personas con discapacidad que viven en un entorno social y familiar.

Estos programas de servicios sociales pueden ser programas de convivencia, que permiten la relación con otras personas como por ejemplo los programas de ocio y tiempo libre, los clubs de ocio y los campamentos de verano. Así como programas de cooperación social, destinados a potenciar la vida de la comunidad mediante la realización de tareas comunes y fomentando la iniciativa social, entre estos se encuentran los grupos de autoayuda, acogida y vuelta a casa y actividades de fomento de la participación social.

Enmarcados en este mismo tipo de ayudas a los servicios sociales, se encuentran también los programas de intervención para la prevención e inserción social, apoyando tanto a las personas con discapacidad como a sus familias.

Las Prestaciones Económicas Individuales para las personas con discapacidad se dividen en dos clases, unas dirigidas al fomento del desarrollo personal que tienen por objeto facilitar la autonomía personal a personas con problemas motores o sensoriales, proporcionando el mantenimiento en el propio entorno familiar y social, incrementando su autonomía y favoreciendo sus relaciones y la integración en la sociedad.

Entre estas ayudas, cabe destacar las destinadas a la eliminación de barreras arquitectónicas en el interior de la vivienda y la adaptación funcional del hogar, ayudas para la adaptación de vehículos, ayudas para transporte, así como para atención especializada en centros residenciales.

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