El presidente del PP-A, Javier Arenas, aseguró hoy que el PP apoyará la Ley de Víctimas del Terrorismo andaluza propuesta por el PSOE, que ha registrado una proposición de ley en el Parlamento de Andalucía, "diga lo que diga".

En su intervención en el acto homenaje celebrado en Sevilla por el PP-A con motivo del 12º aniversario del asesinato a manos de la banda terrorista ETA del entonces concejal en el Ayuntamiento hispalense Alberto Jiménez-Becerril y su esposa, Ascensión García, que contó con la presencia de la presidenta del Parlamento vasco, Arantxa Quiroga, Arenas afirmó que "lo importante no es quien la haga, sino que exista esa ley".

Así, recordó que el PP ya presentó una propuesta en este sentido en 1994, que fue rechazada por el PP, y volvió a plantearla en 1996 por segunda vez y hace poco tiempo por tercera, con el mismo resultado, y añadió que la proposición de ley presentada hace unos días por el PSOE es "una copia" de dichas propuestas populares.

Por tanto, lamentó que "desgraciadamente para algunos quién la hacía es más importante que la propia ley" y criticó que "algunas asociaciones de víctimas del terrorismo no han sido consultadas", pese a lo cual insistió en el apoyo a la futura norma andaluza. En esta línea, aprovechó para reiterar su petición de que una sala del Parlamento andaluz lleve el nombre de Alberto Jiménez Becerril, como "único diputado andaluz asesinado por los terroristas".

De otro lado, destacó la presencia en el acto de la presidenta del Parlamento vasco, donde consideró que "se ha dado un tirón importante en beneficio de la libertad", a lo que añadió que "el cambio se va notando en el País Vasco, en la asfixia de la política lingüística, en la política educativa, en la televisión ETB y en que se pueda ver en un telediario un homenaje del Parlamento vasco a la Guardia Civil y la Policía Nacional".

"Sólo esa imagen justifica el cambio político en el País Vasco", sentenció el líder de los populares andaluces, quien consideró que Alberto y Ascensión sentirían "una alegría muy grande" por estas nuevas circunstancias y que "el hecho de que el País Vasco tenga un gobierno comprometido con la Constitución" supone "una oportunidad histórica para derrotar al terrorismo".

"Mucha gente me pregunta si el PSOE hubiera hecho lo mismo, cada uno tendrá su respuesta, pero eso no es lo importante, lo importante es que haya sido posible", reafirmó Arenas, que sentenció que "llegará un día en que se derrote a los terroristas".

Por su parte, Quiroga, que agradeció la invitación, resaltó que el PP vasco "siempre se ha sentido muy cerca del PP-A", al que consideró "cómplice del gran logro, de la etapa de esperanza que se abrió el 1 de marzo del pasado año".

"Lo que nos mueve no es otra cosa que lograr la paz y la libertad, podéis tener el convencimiento de que estamos haciendo esto por eso y por eso superamos las dificultades, porque es una gran oportunidad para demostrar a los vascos que hay otra forma de hacer política y que podemos derrotar a ETA".

Asimismo, lamentó que "el 12 por ciento de los jóvenes vascos dicen que la violencia es un método lícito para lograr objetivos políticos", ya que "eso significa que ETA tiene relevo" e insistió en el papel que cumple el PP en el gobierno vasco, "pinchando constantemente al PSOE para que no se relajen".

"Si el lehendakari, Patxi López (PSOE), hace otra cosa distinta entonces no contará con nosotros y lo sabe", garantizó la presidenta del Parlamento vasco, quien destacó la importancia del "ejemplo" de las víctimas. "La verdadera historia que hay contar en los colegios no es sólo el hecho terrible del asesinato, sino también la letra pequeña de la historia, la de las víctimas que confían en el Estado de Derecho, en las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y en la justicia, que dan un ejemplo de creer en la democracia", agregó.

"Si ellos dan ese ejemplo yo tengo que estar a la altura de las circunstancias", sentenció Quiroga, quien señaló el mérito de que "con el dolor y la rabia del asesinato estas personas sean capaces de dar lo mejor de si mismas" y resaltó el mérito que a su juicio supone que estas personas "sean capaces de educar a sus hijos en libertad, en tolerancia y sin odio".

"hay que aceptar la condición de víctima"

De su lado, la hermana del que era concejal de Hacienda del Ayuntamiento de Sevilla cuando cayó abatido a tiros junto a su esposa en la calle Don Remondo, Teresa Jiménez-Becerril, eurodiputada del PP, afirmó que "no se puede bajar la guardia" e hizo un paralelismo entre la barbarie de ETA y el holocausto nazi. "Nadie duda a estas alturas de que Hitler es un monstruo, porque los judíos llevan 60 años aceptando su condición de víctimas y contando sus historias", explicó.

Según relató Jiménez-Becerril, "no es agradable ir de víctima, contar que a tu hermano le dieron un tiro en la nuca, pero estamos en la obligación de hacerlo, porque ETA asesina a niños, mujeres y hombres y eso es muy importante que se sepa".

"No quiero olvidar, no sólo no puedo, es que no quiero, no voy a pasar página, y exista o no ETA voy a seguir contando las atrocidades para que los asesinos cumplan sus condenas y nunca estemos a merced de un gobierno que negocie con los terroristas", aclaró.

Del mismo modo, dijo celebrar el cambio en el País Vasco, ya que "supone tener a una persona del mismo partido que Alberto y no a un nacionalista" y apostó por "recuperar la memoria en una tierra que tenía como norte la injusticia", para lo que "hay que enseñar a los niños en las escuelas vascas las atrocidades de ETA".

"servidor público" y un "buen administrador"

Asimismo, la senadora popular Soledad Becerril, que era alcaldesa de la capital hispalense cuando ETA mató al matrimonio sevillano, destacó la condición de "servidores públicos" de ambos y añadió que "esto es lo que tienen que saber las generaciones más jóvenes, que murieron por ser defensores de la libertad, de la democracia, por ser servidores públicos que defendían el Estado de Derecho, esto debe estar en Educación por la Ciudadanía, en los textos de la historia contemporánea, esto sí que es memoria".

De igual forma, elogió lo "buen administrador" que fue Alberto, que cuando murió ostentaba la Delegación Municipal de Hacienda en el Consistorio hispalense. "Tras años de dispendio enloquecido, qué falta nos hubieran hecho personas como él, estaríamos en una situación muy distinta".

También intervino en el homenaje el portavoz del PP en el Ayuntamiento de Sevilla, Juan Ignacio Zoido, que resaltó la importancia de "renovar cada año el compromiso con la libertad y la democracia", al igual que el presidente del PP de Sevilla, José Luis Sanz, que consideró que el acto celebrado cada 30 de enero es "la mejor prueba de que no consiguieron callarnos".

El acto contó también con la presencia de la madre del edil asesinado, Teresa Barrios, acompañada por dos de los tres huérfanos del matrimonio, Alberto y Clara, entre otros familiares. Además, estuvieron presentes los padres de Silvia, la niña de seis años fallecida en agosto de 2002 en un atentado con coche bomba contra el cuartel de la Guardia Civil de Santa Pola (Alicante), y el ex presidente de la Asociación de Víctimas del Terrorismo, José Alcaráz.