En declaraciones a Europa Press, el alcalde de Puigcerdà, Joan Planella, explicó que la intención es demostrar que "en la administración no prima el afán recaudatorio". "No solamente queremos sancionar, también queremos premiar", aseguró, ya que afirmó que la medida también pretende estimular el civismo entre los ciudadanos.
Planella definió esta medida como "innovadora" y animó a otros consistorios a sumarse a ella. "Simplemente queremos que la gente haga las cosas bien, no queremos recaudar más, queremos que se cumpla la ley", manifestó.
El alcalde aseguró que todavía no saben cuánto podrán repartir entre los buenos conductores, ya que no tienen cerrada la recaudación.
Actualmente, Puigcerdà cuenta con un censo de 9.300 habitantes y un parque móvil de 6.600 coches, aunque por su condición turística, la población puede llegar, según la época del año a las 40.000 personas, con el correspondiente aumento del volumen de vehículos.
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