Así lo dijo hoy el alcalde de Santander, Íñigo de la Serna, durante la visita que realizó al proyecto de regeneración urbanística de la zona San Simón-Entrehuertas, recientemente concluido y financiado con 1.790.000 euros del Fondo Estatal de Inversión Local.

La actuación, en la que ha habido un proceso de "debate constante con los vecinos para ir limando cuestiones", ha afectado a las calles Laredo, San Simón, Macías Picavea, Sol (hasta la iglesia de los Carmelitas) y el tramo final de la calle Los Aguayos. En concreto, se han mejorado las zonas peatonales, eliminado las barreras arquitectónicas, peatonalizado el tramo de la calle San Simón comprendido entre Laredo y Santa Lucía, y se ha semipeatonalizado la calle del Sol.

El alcalde recordó que, junto a la regeneración urbanística, está en marcha y "comienza a dar sus frutos" el proceso de rehabilitación de viviendas en un entorno que mantiene un valor patrimonial y tradicional "muy importante". En concreto, el Área de Rehabilitación Integral (ARI) abarca 80 edificios y 650 viviendas, en las que residen 1.400 vecinos, y ya han comenzado a darse "los primeros pasos" con la inspección técnica y el estudio sociológico del entorno.

Además, el regidor apuntó que se ha concluido o se está realizando un conjunto de actuaciones en la ladera sur de General Dávila como el funicular del Río de la Pila y las futuras escaleras y rampas para llegar a la base del mismo, el que será Centro Cívico y Cultural del Río de la Pila, las escaleras mecánicas que se ubicarán en el barrio de Santa Teresa, etcétera.

Sin embargo, para De la Serna, "lo más importante no es lo que estamos haciendo sino lo que está por venir", es decir, la rehabilitación de las viviendas "ahora que las calles están rehabilitadas", y el comienzo de un movimiento sociocultural en la zona de mayor concentración de agentes culturales de todo Santander. "Así se hacen las ciudades, con la dinamización de los vecinos, y no sólo con la ayuda del Ayuntamiento, que llega hasta donde llega", remachó.

De este modo, dijo el alcalde, "se puede visitar ya un barrio tradicional y característico del antiguo Santander que ha recuperado todo su esplendor y que a partir de ahora, con el movimiento sociocultural, todavía va a ser mayor".

En este sentido, subrayó que la regeneración urbanística es "importante pero el urbanismo no hace las ciudades". "Las ciudades las hacen los ciudadanos, y por lo tanto, estas actuaciones pretender servir de motor de arranque, de impulso para un proceso de regeneración y de dinamización de los propios barrios, algo que le corresponde no sólo al Ayuntamiento sino a los vecinos, comerciantes, hosteleros, empresarios, etcétera", dijo. Por tanto, remachó, "el protagonismo de lo que vaya a ser este área lo decidirán los propios vecinos".

Al respecto, apuntó que se trata de una zona "donde más cultura se respira" y ya se han sentado las bases de un movimiento sociocultural en el que la cultura tendrá "un protagonismo especial" dentro de un proceso de "relanzamiento de todo el entorno, que puede ser emblemático, y convertir a todo el barrio, hasta el Río de la Pila, en motor de actividad social y cultural".

"Ese movimiento ha empezado a dar sus frutos y muchos santanderinos vendrán a este entorno para participar en las actividades que se programen y en las que el Ayuntamiento estará de la mano porque nuestro objetivo es acompañar a los vecinos y a los empresarios en esos procesos de dinamización que arrancan con la finalización de las obras urbanas", concluyó el regidor.