Los hechos ocurrieron en la madrugada del pasado domingo, cuando el Servicio de Vigilancia Exterior (SIVE) de la Comandancia de la Guardia Civil de Málaga detectó una embarcación en la zona de Bahía Dorada, próxima a la costa de Estepona, y que tomó tierra en Playa Moral, donde los efectivos recuperaron 52 fardos de hachís, con un peso de 1.560 kilogramos, además de una embarcación neumática con dos motores fueraborda y un camión frigorífico.

Por otro lado, en una segunda actuación, desarrollada en Marbella en la madrugada del pasado lunes, detectaron una embarcación, que finalmente alijó en la playa de Costabella, y que dejó en lugar una embarcación neumática, una furgoneta con cinco bultos de hachís en su interior, y un número indeterminado de bultos de hachís esparcidos por la playa, según informó la Guardia Civil a través de un comunicado.

Tras esto agentes de la Guardia Civil reconocieron el lugar y comprobaron que la furgoneta no figuraba como robada, por lo que localizaron a su propietario y lo detuvieron como presunto autor de un delito contra la salud pública. Además, el detenido junto con la droga incautada y demás género intervenido fueron puestos a disposición judicial.