Los habitantes de un bloque de pisos ubicado en la barriada sevillana de Begoña, varios de los cuales están amenazados de desahucio por la propiedad del edificio, criticaron hoy la situación que han vivido en los últimos días, cuando las fuertes lluvias caídas con motivo del temporal y el impago del mantenimiento que los vecinos critican ha motivado un cortocircuito que ha propiciado que los residentes hayan permanecido hasta tres días sin luz.

El portavoz de los afectados, Carlos Serrano, explicó a Europa Press que debido a las malas condiciones de mantenimiento en la que se encontraba la instalación eléctrica el conjunto "explotó", lo que "podría haber provocado un incendio" y, en cualquier caso, motivó que la instalación tuviera que montarse de nuevo.

Tras varias "pegas" que propiciaron que los afectados intentaran arreglar el problema mediante el pago a un profesional de manera particular, finalmente varios técnicos pudieron arreglar el problema, "pero a costa de insistir muchísimo y habiendo hecho únicamente un apaño".

"Después de haber estado tres días sin calefacción y con la comida estropeándose, nos enteramos de lo más increíble, que es que no se paga la comunidad de los pisos vacíos, con lo que la deuda es bastante alta", criticó Serrano, que señaló que "algún día ocurrirá una tragedia".

Respecto a la situación general de los afectados, el portavoz vecinal expuso que el próximo amenazado de desahucio por la propiedad del edificio, el inquilino Juan León, de 60 años, ha iniciado ya contactos con la Oficina Técnica de Atención a Inquilinos en Situación de Abuso (Otaínsa), dependiente de la Delegación de Infraestructuras para la Sostenibilidad del Ayuntamiento de Sevilla, con vistas a la posible adjudicación de una vivienda social, como ya sucediera en el caso de Concha y Eduardo.

El periodo de abandono voluntario —tras el cual se produciría un alzamiento judicial para su expulsión de la vivienda— caduca mañana, expuso Serrano, que indicó que los vecinos se reunirán la próxima semana para estudiar el caso de León, "que no saldrá de su vivienda porque no tiene dónde ir, aunque ya está con todas sus cosas empaquetadas".

Por último, el portavoz vecinal aseguró que los residentes amenazados, que se concentran en inmuebles de las calles Guadalcanal y Valdelarco de la barriada, ya han redactado un informe presentado al Ayuntamiento y con vistas a hacer lo propio con el Defensor del Pueblo Andaluz la próxima semana.