Menos aparcamientos y dificultad de circular, principales problemas de la Plaza de Abastos por las obras de Bretón

La disminución de las plazas de aparcamiento y la dificultad para circular por determinadas calles cercanas al Mercado de San Blas son los principales problemas con lo que se están encontrando los comerciantes de la Plaza por las obras de peatonalización de la calle Bretón de los Herreros.

La disminución de las plazas de aparcamiento y la dificultad para circular por determinadas calles cercanas al Mercado de San Blas son los principales problemas con lo que se están encontrando los comerciantes de la Plaza por las obras de peatonalización de la calle Bretón de los Herreros.

Así se lo trasmitieron esta tarde los responsables de la Asociación del Mercado a la portavoz del Grupo Municipal Popular, Cuca Gamarra, con quien mantuvieron una reunión, en la que también participaron los concejales populares Javier Merino y Alfredo Iturriaga.

Gamarra explicó que el encuentro responde a "hablar de primera mano, conocer por los propios comerciantes la situación y los problemas con los que se encuentra la Plaza", un enclave que definió como "un centro de referencia para la ciudad".

"Es un edificio de referencia, además de un espacio también referente en la venta de productos de nuestra tierra", recalcó la portavoz popular, quien hizo especial hincapié en la importancia de, junto con los propios comerciantes, "buscar proyectos o enfoques que favorezcan la dinamización" del Mercado.

Destacó Gamarra los problemas de aparcamiento "y de otras cuestiones" que están causando las obras, y señaló la necesidad de incidir "en aspectos como la mejora del estacionamiento y también del transporte público" como alternativa".

Por su parte, el presidente de la Plaza, Ricardo Galilea, recalcó igualmente "la importancia que tiene para nosotros que se facilite el aparcamiento, tanto en superficie como en estacionamientos subterráneos" y que se potencie del mismo modo, el uso del transporte público para acceder a la zona.

Apuntó que, desde que se iniciaron las obras "no se ha notado un descenso en las ventas, pero sí que la gente comienza a quejarse por las molestias de este tipo de trabajos".

En concreto, comentó que "mucha gente que viene de los pueblos encuentra dificultades para circular porque hay calles cortadas y diferente circulación, así que se quejan de que se pierden; a los que estamos en Logroño nos parece fácil, pero a quien no conoce los cambios, no".

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