¿Cómo la han recibido?

Muy bien. Todo el mundo se alegra muchísimo de que haya llegado. ¡Aún estoy en una nube..!

¿Cómo afrontó la última etapa de ascensión sola?

Mis compañeros no estaban bien físicamente. Al principio no tenía pensamiento de llegar a la cima, pero cuando empecé, yo misma me iba automotivando. Lo que me subió hasta la cumbre fueron las ganas y la fuerza de voluntad.

¿Tuvo miedo?

Más que miedo, lo que me pasó es que llegué a arrepentirme un poco, pensando «¿qué haces?» Pero me sentía bien, no tenía frío... y seguí adelante.

¿Qué fue lo primero que pensó al estar arriba, sola?

¡Uf! Me emocioné, me entraron ganas de llorar porque, cuando ves tanta belleza a tus pies, te acuerdas de tus seres queridos.

¿Cuál es su próximo reto?

Me gustaría coronar una montaña más alta. Mientras nada me lo impida, lo seguiré intentando.

¿Dejaría el alpinismo?

Sólo si tuviera un hijo o mi familia me necesitara. Pero por ahora ¡continuaré haciendo fotos desde las alturas!.

BIO

Catalina Quesada Castro. Sevillana, de 36 años. Funcionaria en la Diputación y  miembro del Club Alpino Sevillano. Vive en Nervión.