Agramunt, que se expresó en estos términos en un comunicado en un comunicado, consideró que la salida de De la Vega del Gobierno central "sería una gran noticia para los valencianos, puesto que la vicepresidenta ha sido nuestra peor representante en la Moncloa de toda la historia de la democracia, empezando porque ni siquiera vive entre nosotros y se empadronó en Beneixida sólo para votarse".

En este sentido, apuntó que "De la Vega lidera la marginación de los valencianos por parte del Gobierno de Zapatero porque fue quien de su puño y letra firmó la derogación del trasvase del Ebro para obtener a cambio el voto de ERC en el Congreso de los Diputados".

El portavoz territorial manifestó su sorpresa porque "sean sus compañeros de partido quienes comiencen las especulaciones de la salida de la vicepresidenta de la Moncloa", aunque, a su juicio, "este gesto demuestra que los socialistas valencianos nunca olvidarán el desprecio sufrido durante la campaña electoral por De la Vega que no contó con ellos para sus actos".

"El PSPV sigue con su guerra y su división y ahora le mueven la silla a la todopoderosa vicepresidenta aunque cuando se formalice su salida, Zapatero se quedará sin ningún representante entre los ministros, demostrándose así lo poco que le importa la Comunitat Valenciana al presidente de todos los españoles", recalcó.

Informe sobre el cabanyal

Por otra parte, sobre el informe del Ministerio de Cultura que paraliza el Plan del Cabanyal de Valencia, Pedro Agramunt consideró que se trata de "un gesto más del despotismo y la marginación que Zapatero dirige a la Comunitat Valenciana en todas las áreas de su gobierno".

"Zapatero no perdona que los valencianos no le voten ni a él ni a sus siglas en todas las convocatoria electorales desde que es secretario general del PSOE y por eso nos ha quitado el agua, la financiación que nos corresponde, no nos da los agentes necesarios y, sobre todo, ni siquiera nos visita", manifestó el senador..

En su opinión, "el silencio del Gobierno sobre el fichaje de un miembro de Salvem el Cabanyal por parte de la vicepresidenta demuestra que fue con una intención clara, parar políticamente lo que hasta el momento no habían conseguido a través de los tribunales".

Por último, Agramunt apuntó que "tanto el ayuntamiento de Valencia como la Generalitat tienen todo el apoyo de todos los 'populares' para emprender todo tipo de acciones contra esta nueva marginación del Gobierno de Zapatero".