El presidente de la agrupación, Alberto Solanes, trasladó hoy su confianza en que las obras de construcción del proyecto, que ascenderá a 3 millones de euros, comiencen en 2010 y que cuente con un plazo de ejecución de un año aproximadamente. Durante este tiempo, la agrupación, que se encargará de gestionar el observatorio propiedad del Gobierno de Aragón, está perfilando su funcionamiento, para que su puesta en marcha coincida con la apertura de sus puertas.

En este sentido, Solanes informó de que "estamos trabajando en poder traer a Huesca líneas de investigación y que ello atraiga otros aspectos, que todo tenga su efecto dominó. También hay que hablar con otras comunidades autónomas para establecer colaboraciones, lo que hay que hacer es abrir la puerta y tener por lo menos durante seis meses todo el trabajo y desarrollo estructurado".

El edificio proyectado tiene forma de hangar, sobre una superficie construida de 1.200 metros cuadrados en una parcela de 5.300 metros cuadrados. El presidente de la agrupación astronómica manifestó que el futuro centro no será sólo un planetario, ya que sus instalaciones permitirán la investigación científica.

El espacio, en el que se instalarán dos telescopios especializados para uso diurno y nocturno, se dividirá en varias aulas de formación, para impartir cursos y talleres, y salas de exposiciones, administrativas. Además del espacio reservado para el planetario y para los observatorios.

Solanes ha manifestado su satisfacción, principalmente, por las líneas de investigación que a partir de ahora se podrán llevar a cabo en este campo en Huesca en el conjunto de un proyecto que supondrá un nuevo atractivo turístico a la capital altoaragonesa. La agrupación oscense pretende que el futuro centro astronómico tenga un gran efecto turístico y para ello, va a iniciar conversaciones con colectivos y asociaciones culturales, empresariales y económicas para estrechar relaciones y establecer colaboraciones.

Señaló también que "se organizarán visitas y se intentará vender Huesca, para ello las visitas habrá que llevarlas a otros puntos de la ciudad, por lo que vamos a empezar a hablar con distintas asociaciones, para ver si entre todos logramos que esto sea un revulsivo para la ciudad".

Solanes prevé la posible contratación de cuatro o cinco personas que trabajen una vez entre en funcionamiento el centro, en el que, entre otras cosas, se simularán viajes por el espacio, se admirarán fenómenos celestes y terrestres.