El PNV de Barakaldo demandó hoy que se dé "cuanto antes una solución" a la situación de los vecinos del barrio de Rontegi que han sido trasladados del ambulatorio de Zaballa al de Urban y acusó al alcalde de esta localidad vizcaína, Tontxu Rodríguez, de "prohibir que se vote" una iniciativa de apoyo a los afectados en el próximo pleno municipal.

En un comunicado, la formación jeltzale lamentó la situación en la que se encuentran los 1.500 vecinos de Rontegi a los que Osakidetza ha trasladado del consultorio de Zaballa al de Urban, a la espera de que se construya el de Rontegi.

El PNV anunció la pasada semana una batería de iniciativas para solidarizarse con los afectados, entre ellas la presentación de una moción "para que con carácter urgente la corporación municipal instase a Osakidetza a que reconsiderase su decisión, bien hasta que se construyera y equipara el nuevo ambulatorio de Rontegi, o bien hasta que el Ayuntamiento arreglase los accesos al Centro de Salud de Urban".

"Hasta ahora el alcalde y su equipo se han permanecido en silencio respecto a este asunto. Los afectados esperaban su apoyo, y se han encontrado con la indiferencia y el menosprecio del equipo de Gobierno. Los mandatarios socialistas sólo han tomado, hasta el momento, una decisión respecto al problema de Rontegi y ha sido prohibir que los grupos municipales podamos votar la moción de PNV para pedir soluciones a Osakidetza", denunció.

Tras lamentar que Tontxu Rodríguez se haya posicionado "del lado de los que han generado el problema" a los vecinos de Rontegi, aseguró que si el PSE "hubiera cumplido los compromisos del acuerdo presupuestario de 2009, firmado con el Partido Nacionalista Vasco, nuestros vecinos no tendrían este problema porque nuestro partido propuso la construcción de accesos mecánicos entre el centro de la ciudad y la zona Urban, a través de la calle Pormetxeta, para los cuales destinamos un millón de euros".

Según recordó, también se planteaba la instalación de una parada del autobús urbano en la entrada del ambulatorio, "algo que, aunque en su día admitieron los dirigentes socialistas, ahora se desdicen y faltan a su palabra, sin tener en cuenta las consecuencias nefastas para nuestros vecinos".

El PNV de Barakaldo censuró que los socialistas, que dirigen el Gobierno municipal, "han incumplido sus acuerdos" y, por "su culpa", tanto los vecinos de Rontegi como los de Urban "tienen que padecer las enormes cuestas que separan el centro de Barakaldo de la zona de la Ría".

Este problema, añadió, ha quedado en evidencia para los vecinos de Rontegi que "se han encontrado con una decisión impuesta por Osakidetza, que no ha tenido en cuenta los pasos inaccesibles al ambulatorio de Urban, tanto para las personas mayores o con discapacidad, como para los aitas y amas que tienen que acudir con carritos de bebé".

Iniciativa parlamentaria

Ante "el desbarajuste" originado por la decisión de Osakidetza, el PNV registró en el Parlamento vasco una proposición no de ley en la que insta al Departamento de Sanidad y Consumo a mantener en el ambulatorio de Zaballa a los vecinos de Rontegi que así lo soliciten, mientras se construye el nuevo centro de salud en su barrio.

Asimismo, reclama que puedan mantener a "sus médicos de siempre" en el consultorio de Zaballa y que, en caso de que no sea posible, se traslade al ambulatorio de Zaballa, "aunque sea en horario de tarde", a los dos médicos nuevos que se les han asignado en Urban.

Finalmente, se plantea requerir al Ayuntamiento de Barakaldo para que "ponga fin al retraso en la instalación de accesos mecánicos" que unan la Herriko Plaza con la Avenida Murrieta, así como la entrada en funcionamiento del autobús urbano, con parada "en la misma puerta" del consultorio de Urban.

El PNV explicó que está a la espera de "recibir la llamada del consejero de Sanidad", Rafael Bengoa, al que solicitó por carta el pasado lunes 21 una reunión para entregarle "las 654 firmas recogidas en las ocho horas y media que duró la campaña de recogida de adhesiones con nuestros vecinos afectados". "Queremos que en esa reunión puedan estar algunos de los afectados para que el responsable del Gobierno Vasco pueda conocer de primer mano los problemas que su decisión ha originado", indicó.

La formación jeltzale defendió la necesidad de que "cuanto antes se dé una solución a los más de 1.500 vecinos afectados" y criticó que, hasta ahora, "muchos de los afectados han intentado solucionar el problema a título personal, pero se han encontrado disculpas y falsedades".

En este sentido, señaló que "a algunos de ellos se les dijo que para el viernes 18 iban a poder acudir de nuevo a su médico de siempre al Ambulatorio de Zaballa, pero han transcurrido diez días y la respuesta es que todavía no se ha podido realizar el cambio y que no saben cuándo se hará o si se hará".

"Los partidos políticos tenemos que implicarnos en la búsqueda de una solución. El alcalde de Barakaldo lo ha impedido en nuestro Ayuntamiento, esperemos que sus compañeros de partido no hagan lo mismo en el Parlamento vasco", demandó.