El supuesto homicida, cuyas iniciales corresponden con J.A, fue detenido en la tarde de ayer por agentes de la Jefatura Superior de Policía de Ceuta a su paso por la Frontera del Tarajal. Según las mismas fuentes, el arrestado, un joven marroquí de 24 años, cuenta con antecedentes policiales por delitos de lesiones y amenazas cometidas en la ciudad ceutí.

Éste, junto con las diligencias policiales, pasará a disposición del Juzgado de Instrucción en funciones de Guardia de Ceuta.

Los hechos se remontan al pasado 13 de octubre. Según la reconstrucción de los mismos, el fallecido estuvo en compañía de otro marroquí en un bar del barrio de Delicias horas antes de su muerte. Ambos estuvieron tomando varias consumiciones y durante un rato la víctima hizo ostentación del dinero que había ganado durante los días que estuvo vendimiando.

Posteriormente abandonaron el local, del que fueron vistos saliendo juntos. Uno de los inquilinos del piso indicó que cuando llegaron los dos al domicilio, el fallecido le presentó a su acompañante, si bien dicho inquilino se fue a su habitación y dejó a ambos en la cocina "preparándose la cena". Horas más tarde, éste oyó cómo alguien abandonaba sigilosamente la vivienda. Horas más tarde, sobre las 05.30 horas, se dirigió al salón y halló el cadáver de su compañero de piso.

Tras tomar declaraciones a todos los testigos que fueron localizados por los agentes encargados de la investigación, y tras obtener los resultados de la inspección técnico-policial llevada a cabo por los agentes pertenecientes a la Brigada Provincial de Policía Científica, los agentes de la Policía averiguaron la filiación del presunto responsable de los hechos, J.A, nacido en 1985 en Marruecos.

Una vez se identificó plenamente al autor de los hechos, las gestiones policiales se encaminaron hacia la localización y detención del mismo, las cuales no se pudieron lograr al encontrarse en situación desconocida.

Después de ampliar la investigación policial, se tuvo conocimiento de que el presunto responsable de los hechos, nada más abandonar el domicilio donde había cometido el homicidio, se dirigió a la estación de autobuses, donde cogió un autobús para Madrid y se dirigió al aeropuerto de Barajas con intención de abandonar el país y viajar a Tánger (Marruecos).

La víctima, encontrada con heridas por arma blanca en el salón de la vivienda, estaba en Valladolid desde hacía tres meses y trabajaba en la recolecta de productos agrarios.