Según informó la Policía a través de una nota de prensa, el 'modus operandi' del detenido, era el mismo en todas las ocasiones en las que fue denunciado. Llegaba a los respectivos establecimientos de hoteleros y contrataba o reservaba las habitaciones o el hospedaje por más de un día, adquiriendo así la confianza del arrendador.

Al no disponer de equipaje que hiciera sospechosa su salida, abandonaba los establecimientos un día antes de lo previamente acordado y sin abonar cantidad alguna de dinero por el tiempo que había estado alojado.

Para evitar el frío, propio de estas fechas, elegía establecimientos de dos y tres estrellas, habiéndose hospedado en cuatro de Gijón, tres de Oviedo, uno de Cangas de Narcea, uno de Langreo, en todos ellos con la clara intención, desde el primer momento, de no abonar cantidad alguna por ello y adeudando en total casi 1.000 euros.

Al carecer de un domicilio conocido en el Principado, tanto propio o perteneciente a algún familiar o pariente lejano, y considerar la vida itinerante de esta persona, la Policía baraja la hipótesis de que haya hecho lo mismo en hospedajes de otras regiones.